El papa Francisco fue un actor fundamental para encausar el acercamiento entre Estados Unidos y Cuba, después de décadas de relaciones hostiles. Meses atrás el Sumo Pontífice confirmó su visita al país del Norte, donde entre otras cosas dará un discurso nada menos que en el Congreso, en Washington. A esa gira a href="http://www.infobae.com/2015/04/22/1723957-el-vaticano-confirmo-que-el-papa-francisco-visitara-cuba-septiembre" rel="noopener noreferrer" la Santa Sede le agregó un nuevo destino: La Habana./a
Así, el Papa argentino sigue los pasos de sus dos antecesores, Juan Pablo II y Benedicto XVI, quienes arribaron a la isla en 1998 y 2012, respectivamente.
Karol Józef Wojty?a fue el primer jefe del Estado del Vaticano en pisar suelo cubano. Su visita se produjo entre el 21 y 25 de enero, de 1998. En aquella oportunidad, el por entonces Papa propuso que Cuba "se abriera al mundo y que el mundo se abriera a Cuba".
Ese mismo pedido realizó Su Santidad a Fidel Castro, cuando el líder cubano viajó oficialmente al Vaticano en noviembre de 1996. Ante la solicitud del Santo Padre de "abrir" el país el mundo, el ex presidente de la isla le respondió que no podía hacerlo "porque tengo una pistola en la sien", en referencia, en parte, al bloqueo económico de Estados Unidos.
"Ábrete al mundo que yo te quito la pistola", le contestó Juan Pablo II. Sin embargo, el régimen castrista mantuvo su postura e hizo caso omiso al reclamo.
Otras de las consignas que pronunció el Papa en sus diferentes apariciones públicas ante los miles de cubanos que se movilizaron por todo el país fue abogar por la "Globalización de la Solidaridad".
A diferencia de Juan Pablo II, Benedicto XVI inició su visita (del 26 al 28 de marzo de 2012) desde la ciudad de Santiago de Cuba, donde ofició una misa. Al día siguiente emprendió viaje hacia La Habana.
"Con las armas de la paz, el perdón y la comprensión, luchen para construir una sociedad abierta y renovada, una sociedad mejor, más digna del hombre, que refleje más la bondad de dios", expresó a los miles de ciudadanos isleños que se acercaron a la Plaza Antonio Maceo, en la ciudad de Santiago.
El presidente Raúl Castro, ante estas palabras, volvió a apuntar contra los actores extranjeros, a quienes señaló como los únicos responsables del aislamiento de la isla.
Tal como fueron las visitas de Juan Pablo II y Benedicto XVI, la gira de Francisco por Cuba representará un hecho de relevancia histórica potenciado por los diálogos de entendimiento que mantienen desde el pasado mes de diciembre la isla con los Estados Unidos.