Petroleras frenaron sus planes para nuevas exploraciones en Malvinas

Tres empresas con inversiones en las Islas resolvieron detener la investigación de nuevos pozos. Su decisión se dio cuatro días después de la denuncia argentina. Alegan que se debió a la caída de los precios internacionales del barril

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Las firmas Noble Energy, Falkland Oil and Gas (FOGL) y Edison International anunciaron su decisión de frenar los planes de exploración que tenían para trabajar en un segundo pozo petrolero al sur y al este de las Islas Malvinas.

"Creemos que una administración de capital disciplinada es crucial en el ambiente actual de precios del petróleo y esta decisión deja a FOGL en una posición financiera más enérgica", explicó este lunes el CEO de la empresa, Tim Bushell.

Las compañías aseguraron que el freno a las inversiones fue decidido por los bajos precios internacionales a los que cotiza el barril de crudo desde los últimos meses. Casualidad o no, el anuncio se produjo apenas cuatro días después de que el gobierno argentino presentara una denuncia penal contra esas tres empresas, además de Rockhopper Exploration y Premier Oil por "llevar adelante actividades de exploración de hidrocarburos en la plataforma continental argentina sin autorización".

Las tres firmas aseguraron que seguirán con sus perforaciones en otras regiones de las Islas. Incluso mostraron su esperanza de poder retomar en un futuro cercano las operaciones suspendidas esta semana. "Noble, Edison y FOGL siguen plenamente determinados en favor de la exploración en la cuenca sur y este", señalaron a través de un comunicado citado por la agencia internacional de noticias Reuters.

Según la firma de inversores Stifel, la noticia será tomada de manera positiva por los mercados: el segundo pozo que la empresa FOGL pensaba realizar en Malvinas era una de las operaciones más caras de la firma. Su cotización en bolsa parece haber confirmado esa lectura, ya que el lunes sus acciones abrieron con un alza de 4,3 por ciento.

La tensión diplomática entre Argentina y Gran Bretaña llegó a un nuevo nivel la semana pasada, cuando el gobierno argentino decidió citar al embajador británico luego de que Alicia Castro, su representante ante Londres, hubiese sido convocada apenas horas antes para reclamar por los dichos de Cristina Kirchner en su discurso del 2 de abril en homenaje a los ex combatientes de la Guerra de Malvinas.