La mansión abandonada de Mike Tyson: hasta jaulas para tigres

163
163
163
163
163
163

Fue una de las excentricidades más resonantes de la vida de uno de los más grandes -y controvertidos- boxeadores de la historia. Y ahora es todo una ruina. Se trata de la mansión que Mike Tyson construyó en Southington, Ohio, Estados Unidos. Hoy es un símbolo de lo que fue la carrera del púgil: del brillo a la ruina.

Es que según un informe reciente del diario británico Mirror, la vivienda llena de lujos exagerados está en un total abandono. La casa en la que Tyson además entrenaba y se ponía a punto bajo la supervisión de Don King contaba con todo tipo de comodidades y excentricidades. Hace días, sus puertas fueron abiertas al fotógrafo Johnny Joo, quien inmortalizó, además, con una cámara de video sus diferentes habitaciones.

La casa cuenta con cinco dormitorios, varias salas de estar, siete baños completos, una cocina completísima y otra mini-cocina y lavadero, según el periódico inglés. Pero también tiene tres cocheras -internas y externas-, jacuzzi de lujo con espejos en el techo, una piscina olímpica bajo techo, jaulas para tigres y una cancha de basquetbol.

Las paredes de esa mansión guardan recuerdos de todo tipo. Sobre todo las famosas "fiestas" de Tyson, donde todo parecía valer. Como si fuera una ironía de la vida, se planificó que se convierta en una iglesia. "Lo sentí frío, vacío y misterioso. No un misterio tenebroso, sino un misterio interesante", señaló Joo luego de recorrer la mansión del ex campeón mundial.

"La habitación principal era tan grande como tres casas mías. Todo tenía tanta vida y ahora simplemente acumulan suciedad", agregó el fotógrafo. Esa "vida" a la que se refiere Joo se vino abajo cuando Tyson fue detenido en 1991 acusado de violación. Un año más tarde sería encontrado culpable y pasó unos años tras las rejas. Al salir, creyó encontrar refugio en esa mansión. Sin embargo, había perdido millones, y su situación financiera y económica era pésima. En 1999, debió venderla a 1 millón 300 mil dólares.

Desde ese entonces, ha contado con varios dueños, según explica Mirror. Pero ninguno de ellos se quedó con la propiedad, y el abandono es total. Todavía puede notarse las preferencias de Tyson por algún exceso en la decoración, como los espejos, los candelabros y demás cosas exóticas que están tal cual las dejó el boxeador.