Milagro en Chubut: quedó aislado 20 días por los incendios y se salvó por el reflejo de su cuchillo

Se trata de la increíble historia de un carpintero de 50 años que quedó atrapado por el fuego en el paraje El Turbio. Con el arma, le hizo señas a un piloto chileno que volaba sobre el lugar y fue rescatado. Sólo tenía principio de deshidratación y un golpe en la pierna

Télam 162
El humo se eleva sobre la cordillera chubutense<br> Pablo Wegrzyn 162
@llancafilomar 162

Un milagro en medio de la desgracias. Así podría resumirse la historia de un hombre de 50 años que permaneció aislado durante 20 días por los incendios de Chubut y fue rescatado por los brigadistas del lugar gracias al reflejo de su cuchillo.

El hecho se registró en el paraje El Turbio, una de las zonas gravemente afectadas por los incendios que azotan a esa provincia desde hace muchos días y que consumieron más de 12.000 hectáreas de bosques nativos. El hombre trabajaba en el cerro Plataforma como carpintero y terminó literalmente aislado. Había sido contratado por un club de escaladores de Bariloche y construía un refugio de montaña.

"Desde hace 20 días no se sabía nada sobre su paradero y lo buscamos durante varias jornadas, temiendo incluso que se hubiese quemado", comentó uno de los rescatistas, que agregó que una noche de fuego fuerte "cayó una avalancha de piedras frente al puesto donde se estaba alojando. Parece que se encontró rodeado por las llamas y escapó".

Según contaron, el carpintero estuvo varios días deambulando y tratando de encontrar una salida hacia la cabecera sur del lago Puelo. Finalmente, Hace dos días hizo señas con un cuchillo al piloto de un helicóptero chileno que operaba sobre el río Turbio, quien alcanzó a ver el reflejo del metal contra el sol y avisó por radio al jefe de la brigada.

El grupo que lo rastreaba lo trasladó hasta una escuela que utilizan como campamento base, donde se comprobó que el carpintero "estaba en buenas condiciones físicas". Sólo tenía "un principio de deshidratación y un golpe en una pierna que le dificultaba un poco su desplazamiento", contó el rescatista.

En la zona hay un emprendimiento de origen privado que trabaja en la construcción de una cadena de refugios para albergar a andinistas de todo el mundo que llegan para escalar un paredón de 800 metros que hay en el cerro Plataforma, además del cerro Tres Picos, el más alto de la región.