Los Estados Unidos condenaron este miércoles el ataque a su embajador en Corea del Sur, Mark Lippert, y aseguró que no se teme por su vida después de que un hombre le cortara la cara y la muñeca con una cuchilla cuando se dirigía a dar una conferencia en Seúl.
"Condenamos rotundamente este acto de violencia. El embajador recibe tratamiento en un hospital local, pero no se teme por su vida", informó el Departamento de Estado de los Estados Unidos en un comunicado.
"La Embajada en Seúl está en coordinación con las autoridades locales. No tenemos más detalles en este momento", añade la nota.
Lippert fue atacado por un hombre que dijo estar en contra de las maniobras conjuntas que Washington y Seúl realizan desde esta semana en territorio surcoreano, según medios del país asiático.
El sospechoso, identificado como un hombre de 55 años apellidado Kim, cortó con una cuchilla la cara y la muñeca del embajador cuando éste llegaba a dar una conferencia en el centro de Seúl, informó la agencia Yonhap.
Las imágenes de televisión mostraron al embajador ensangrentado en la cabeza y el brazo, aunque solo resultó herido de levedad, según los medios surcoreanos.
Lippert, de 42 años y en el cargo desde el año pasado, fue trasladado a un hospital cercano mientras que el atacante fue detenido de inmediato.
"La Embajada en Seúl está en coordinación con las autoridades locales"
El sospechoso gritó proclamas contra las maniobras militares Key Resolve y Foal Eagle que los ejércitos de EEUU y Corea del Sur comenzaron de manera conjunta en territorio surcoreano el pasado lunes, según la policía.
Cada año, ambos países aliados realizan simulacros de respuesta a un ataque norcoreano y maniobras en tierra, mar y aire.