Diputados opositores llevaron a sus bancas carteles para reclamar por el atentado a la AMIA y Cristina Kirchner no dejó pasar la oportunidad de cuestionar el gesto: "A los que me ponen cartelitos para que hablen de la AMIA, sepan que de la AMIA hablo desde el año 1994. En el año 1996 denuncié al juez Galeano y a todos los que encubrieron el atentantado". La Presidente empezó entonces el tramo más duro de su discurso, con críticas a la oposición, la Justicia argentina y hasta el Estado de Israel.
A continuación, la mandataria denunció que en los tribunales argentinos "se quiere demorar el juicio de encubrimiento" contra los ex funcionarios acusados de intentar encubrir el ataque terrorista que dejó 85 muertos en 1994.
"No entiendo por qué Israel reclama por la AMIA y no por su embajada"
Recordó además que "han pasado 21 años y no tenemos un solo condenado" por el ataque. "No hay ni un solo preso por AMIA. No necesito carteles. Yo puedo ir con carteles al frente de la AMIA para decirles también que un ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja, es un encubridor y vaciador de bancos. Traicionó a su religión y a su asociación. Así que no me vengan a hablar a mí de la AMIA", desafió.
A continuación, Cristina Kirchner pasó a referirse al segundo peor atentado terrorista que tuvo la Argentina en su historia: el ataque contra la embajada de Israel que dejó 29 muertos en 1992. "Ese fue un territorio israelí. Siempre me ha llamado poderosamente la atención. Todavía no puedo entender por qué el estado de Israel reclama por la AMIA y no por la voladura de su propia embajada", apuntó.
"¿Alguien puede informarme a esta Presidenta cuál es el resultado de la investigación de la Corte Suprema?"
También fue blanco de sus críticas la Corte Suprema de Justicia, tribunal a cargo de la investigación del ataque porque se trata de un terreno internacional sobre territorio argentino. "¿Alguien puede informarle a esta Presidenta cuál es el resultado de la investigación o quiénes son los condenados?", se preguntó. En su palco, el titular del máximo tribunal de Justicia, Ricardo Lorenzetti, no pudo contener su gesto de asombro.
Unos treinta minutos después, la Presidente pasó a hacer una férrea defensa del memorándum que su Gobierno firmó con Irán para crear una Comisión de la Verdad que pudiera tomarle declaración a los iraníes acusados por el atentado a la AMIA.
Recordó además que la caja fuerte del difunto fiscal Alberto Nisman encontraron un borrador que felicitaba al Gobierno por sus gestiones y le pedía que llevase el caso al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para plantear un "casus belli" para que Irán entregue a los acusados o se someta a la posibilidad de una invasión para detenerlos. "Seguro que algún país lo va a vetar. Pero a lo mejor tienen suerte y no va a pasar. ¿Y qué va a pasar? ¿Van a invadir Irán para tomarle declaración a los cinco iraníes?", se preguntó.
La mandataria dijo que entre la denuncia y el escrito de Nisman había dos versiones tan contrapuestas que llamó al enfretamiento "una especie de Nisman vs. Nisman": "¿A qué Nisman le creo? ¿Al de la denuncia sin pruebas o al Nisman que levanta toda mi actuación en Naciones Unidas, que levanta mis discursos, y que reconoce que si bien el memorandum no es lo mejor, persiguió el objetivo de que los acusados se sienten y sean interrogados?", se preguntó. Además, calificó a la denuncia del fiscal como "un escándalo, un bochorno para todos los argentinos", "una verdadera vergüenza y bochorno".
Por último, recordó que "en estos momentos, EEUU está negociando un acuerdo nuclear con Irán, con fuerte oposición del Partido Republicano y de Israel", y se preguntó: "¿Nadie une las cosas? ¿Nadie puede pensar un poquito más allá de lo que le dice Clarín o lo que le conviene para las próximas elecciones?". "No utilicen más la causa AMIA y pidan justicia en serio, pidan que el Poder Judicial actúe en serio, porque lo que ha pasado es bochornoso", concluyó sobre el punto.