Eto'o compró en u$s30 M la mansión maldita por Tutankamón

El delantero camerunés adquirió una enorme propiedad construida en el siglo XIX. Allí murió de forma misteriosa el descubridor de la tumba del faraón

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Al parecer, el camerunés Samuel Eto'o no es una persona muy supersticiosa. El actual jugador de la Sampdoria del fútbol italiano se compró una mansión enorme de 31.000 metros cuadrados, construida en el siglo XIX.

La lujosa propiedad que adquirió el ex del Barça y Chelsea, entre otros, es una finca privilegiada por su ubicación, que está en un espléndido mirador sobre la Riviera italiana. Además, tiene unas espectaculares instalaciones teñidas de múltiples detalles aristocráticos, más de 40 habitaciones, piscina, y un paisaje increíble, entre otras comodidades.

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Pero esta lujosa construcción, que le costó 28 millones de euros (31 millones de dólares) al artillero africano, esconde un pasado tenebroso. Eto'o se arriesga a ser el dueño de una lujosa mansión que tuvo extrañas muertes de tres personas que la habitaron.

Se considera que está maldita por el espíritu de Tutankamon, que perseguiría a quienes allí residen. Primero fue George Herbert de Carnarvon, que murió hace 92 años por una picadura de mosquito.

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'Lord Carnarvon' pasó a la historia por ser un afamado egiptólogo y, por encima de todo, por descubrir en 1923 la tumba del faraón Tutankamon en el Valle de los Reyes, hallando los mayores tesoros vistos hasta entonces del antiguo Egipto.

Carnarvon murió repentinamente en el Hotel Savoi de El Cairo pocos meses después del descubrimiento, tras haber pasado unas vacaciones en su finca italiana, que había adquirido unos años antes.

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La muerte, se debió a la picadura de un mosquito y la leyenda afirma que fue producto de la maldición de Tutankamon, que perseguiría a partir de entonces a todos quienes habitasen en la villa italiana por ser la residencia de su descubridor.

Meses más tarde, falleció su sobrino al caer por las escaleras de la mansión, lo que ya provocó que la finca fuese considerada maldita y quedara deshabitada por mucho tiempo.

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Con los años pareció desvanecerse la maldición, hasta que volvió al primer plano en 2001, cuando la Condesa Francesca Vacca Augusta, ex modelo de Gucci y que pasaba sus días entre Acapulco y la mansión de la Riviera italiana, desapareció de forma repentina para ser encontrada tres semanas más tarde muerta en las playas de Saint-Tropez.

"Él conoce la historia y todo el mundo aquí conoce la historia de Villa Altachiara. Algunos dicen que el espíritu de la condesa aún camina por la finca y que la maldición de Tutankamon ha vuelto, pero Eto'o ama esa casa", aseguró un agente inmobiliario que trabajó en la compra.