El presidente de la Unión de Fútbol de Rusia (UFR), Nikolái Tolstij, aseguró que la entidad destinará los fondos recibidos hace unos días de la FIFA a pagar parte de la deuda del italiano Fabio Capello que ascendería a más de 6 millones de dólares, según la prensa.
El entrenador italiano, seleccionador del equipo nacional ruso, lleva más de seis meses sin cobrar su sueldo. "Hemos recibido hace tan sólo dos días fondos extra de la FIFA y ahora estudiamos el asunto de la deuda ante Capello. Destinaremos todos los fondos para cubrir esa deuda, que los recursos recibidos son escasos y no llegan para cubrir todo lo adeudado", dijo Tolstij.
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A mediados de diciembre, el organismo estatal que se dedica a la inspección de asuntos laborales prorrogó el plazo para el pago del salario del técnico italiano, que cobra 11 millones de dólares al año. Además, multó a la UFR por retrasarse en los pagos. Al aumento de la deuda contribuyó la depreciación de la moneda rusa en un 40% frente al dólar.
Esta crisis económica rusa es muy perjudicial para el desarrollo de la cita mundialista. Se calcula que el presupuesto para cubrir los costos del próximo mundial ascienden a más de 35.000 millones dólares, casi el doble que Brasil 2014. Esa cifra contempla las obras de estadios en once ciudades distintas, que van a ser renovados o construidos desde cero. También están planificadas carreteras y hoteles.
Por ello, esta deuda con el entrenador es el disparador que abre las dudas a las inversiones planificadas para el torneo, que se celebrará del 14 de junio al 15 de julio de 2018. Los gastos de la organización amenazan con salirse de control.
Capello, quien reconoció en octubre que se le estaba acabando la paciencia, no volvió a aludir públicamente a los problemas con su contrato, que lo une a la UFR hasta el Mundial Rusia 2018. La UFR debe también dinero a los ayudantes del entrenador, a los árbitros y a los inspectores de la Premier League.
Quien apoyó a Capello fue el presidente de la UEFA, Michel Platini, que pidió que le paguen el sueldo atrasado al italiano. "Hay que cumplir con los compromisos ante los entrenadores y los futbolistas. Recomiendo a la UFR que solucione este problema", dijo en rueda de prensa.
El francés, que ofreció la rueda de prensa junto al ministro de Deportes ruso, Vitali Mutkó, reconoció que Capello nunca le mencionó este asunto ni tampoco llegó a presentar una queja formal ante la UEFA. No obstante, agregó que el impago del salario del entrenador de la selección "es una mala publicidad para el fútbol ruso con vistas a la Copa del Mundo del 2018".
Capello insiste en que los problemas salariales no influyeron en el rendimiento del equipo, aunque los tres últimos resultados en la fase de clasificación para la Eurocopa Francia 2016 fueron decepcionantes.
Los rusos empataron 1-1 ante Suecia en su visita a Estocolmo y, lo que es peor, sacaron el mismo resultado contra la modesta Moldavia, en condición de local en Moscú. Además, cayeron 0-1 frente a Austria de visitante.