El presidente venezolano, Nicolás Maduro, enfrenta su peor momento de popularidad, con una aprobación de tan solo 22,6% según una encuesta de la firma consultora Datanálisis elaborada en diciembre pasado.
"Es una encuesta que muestra un deterioro muy severo en la percepción del país sobre la economía, y ya se ve claramente el costo político sobre la evaluación de gestión del presidente", afirmó Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, a la AFP.
La popularidad de Maduro ha retrocedido considerablemente desde que asumió la jefatura en abril de 2013, cuando ganó las elecciones con 50,6% de los votos y una diferencia de apenas 223.000 votos sobre el líder opositor Henrique Capriles Radonski.
Después de 19 meses de gestión de Maduro la economía en recesión --cayó 2,3% en el tercer trimestre de 2014-- y una inflación de 63,6% en los últimos 12 meses, pasan una alta factura al gobierno: la evaluación sobre la situación del país es de 86% negativa, "y la autodefinición chavista, que cae con la popularidad de Maduro", explica León.
Una encuesta realizada por la misma consultora entre septiembre y octubre de 2014 mostraba que la aprobación de Maduro llegaba a 30,2%; mientras que en las simpatías partidistas los adeptos al chavismo eran 28,9%, uno de los niveles más bajos en la década.
Asimismo, en ese entonces 81,6% de los encuestados consideraba de regular a muy mala la situación del país.
En su último mensaje de 2014 el presidente Maduro afirmó que en este año se ejecutaría un programa de recuperación económica, aunque sólo presentó algunas metas sin anunciar ninguna medida concreta.
"Estoy convencido de que el año 2015 es el año del gran cambio del modelo económico", aseguró el mandatario el pasado 30 de diciembre, dejando para después de fin de año las reformas en un mercado cambiario signado por la escasez de divisas y la ampliación de la brecha entre el tipo de cambio controlado y el mercado negro a casi 28 veces.
Se esperaba que este mismo sábado se produjeran los esperados anuncios económicos.