A partir del incremento del 28,15% del año pasado acordado con los trabajadores del Congreso, los legisladores nacionales con mayor antigüedad llegarán a percibir un salario de "bolsillo" de más de 60 mil pesos desde el primer día hábil de febrero de este año.
La suma, incluso, llegaría a casi 80.000 pesos si se consideran los adicionales extra que perciben por viáticos aéreos y terrestres. Ello se debe a que los senadores y diputados pueden canjear en efectivo este beneficio en caso de que no usen los 20 pasajes terrestres y 20 tramos áereos, cuya suma monetaria asciende a 19.500 pesos.
La dieta de los representantes parlamentarios se completa con otros ingresos extra como como "desarraigo" -para aquellos que vivan a más de 100km del Congreso- y "gastos de representación", menos los descuentos por impuestos, obras sociales, familiares y ganancias. Ahora bien, no todos los funcionarios del Congreso cobrarán lo mismo, ya que el ingreso bruto varía por la antigüedad en la posición.
Así, el salario neto de un legislador del interior este año crecerá un poco más de 10.000 pesos respecto al año anterior. Hasta diciembre de 2014, aquellos con mayor experiencia gozaron de un sueldo de casi 50.000 pesos en mano y un ingreso bruto cercano a los 58.000. Los "gastos de representación" seguirán en los 10.000 pesos, mientras que el desarraigo aumentará un 20 por ciento, pasando de 8.300 a más de $10.000, según publicó hoy el diario La Nación.
La suba salarial de los diputados, en tanto, será del 27,6 por ciento, un 0,55 menos al que se estableció por la paritaria de los trabajadores legislativos.
La decisión de aplicar los incrementos paritarios de los trabajadores del Congreso al de los legisladores tomó cuerpo en 2012. Por entonces, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, y el presidente del Senado, Amado Boudou, ajustaron los ingresos un 100% con el apoyo de los bloques mayoritarios. Pese a que hubo críticas por haber adoptado tal determinación, la dirigencia parlamentaria la justificaron por el "fuerte retraso" en sus ingresos.
Entre las voces que se oponen a este tipo de ajustes de haberes, figura el bloque del Frente de Izquierda y los Trabajadores. Los diputados de la agrupación, Pablo López y Néstor Pitrola presentaron un proyecto de ley para que las dietas "sean iguales al monto de cuatro (4) salarios mínimo, vital y móvil, vigente nacionalmente". El importe es similar al de un director de escuela con 20 años de antigüedad, de acuerdo al texto de la iniciativa.
"Hay bloques políticos que se oponen a esto planteando que hay que nivelar para arriba" explicó López. "Se trata, sin embargo, de una impostura, porque no hacen nada en ese sentido. La bancada del FIT, en cambio, ha presentado un proyecto para llevar el salario mínimo del trabajador al nivel de la canasta familiar, que hoy supera los 11 mil pesos".