La muerte de cuatro jóvenes en Villa Gesell por el impacto de un rayo fue un antes y un después en los reglamentos de los balnearios de la Costa Atlántica, que ahora deberán contar con la adecuada señalización que alerte a los turistas en caso de tormentas violentas: el banderín negro se sumó a los ya vigentes (celeste, negro y amarillo, negro y rojo, rojo) y significa que la gente debe salir del agua y evacuar de la playa en busca de un lugar seguro donde refugiarse hasta el cese del fenómeno climático.
El programa tendrá además puntos de información al turista sobre qué hacer en caso de evacuación o tormenta fuerte. "Pueden ser las oficinas de turismo, las casetas de los guardavidas o una oficina específica. Pero el turista debe saber dónde conseguir información sobre cómo actuar", le explicó a Clarín el responsable del OPDS, Hugo Bilbao.
Además, la provincia cuenta folletería que sugiere salir del agua y de la playa en caso de banderín negro; seguir las indicaciones del personal policial, del balneario o municipal que esté al mando de la evacuación; no refugiarse debajo de un árbol aislado; alejarse de elementos metálicos y no usar el celular.
Según contaron a Clarín, la resolución 1749 -firmada por el jefe de Gabinete provincial, Alberto Pérez y el responsable del Organismo Provincial de desarrollo sostenible (OPDS), Hugo Bilbao- establece un "Sistema de alertas tempranas y actuación ante fenómenos metereológicos con descargas eléctricas".
Por último, se entregarán detectores de tormentas portátiles en ocho municipios. Se compraron dispositivos Strike Alert, con alarma sonoras y visuales que advierten sobre la cercanía de los rayos.