El jefe de investigaciones criminales de Nairobi, Nicholas Kamwende, dijo que unos 80 de los detenidos eran choferes de los pequeños buses llamados matatus, donde se han producido muchos incidentes de acoso sexual.
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La mujer atacada el lunes por la noche fue hospitalizada con heridas. Kamwende dijo que los ataques son una "amenaza" y que la policía acrecentará la vigilancia para prevenirlos. Las turbas han atacado a mujeres que visten minifaldas, vestidos ajustados o blusas sin mangas.
El hashtag #MyDressMyChoice es tendencia en las redes sociales de este país del este de África donde chocan los estilos de vida occidentales con las tradiciones. Los manifestantes el lunes reclamaron el derecho de las mujeres a vestir como quieran.
El vicepresidente William Ruto sostuvo que Kenia no es una sociedad primitiva y que los atacantes deben ser arrestados. Grupos conservadores han respondido que las mujeres deben llevar vestimenta apropiada.