Las calles de Ferguson, un barrio en los suburbios de la ciudad estadounidense de San Luis, ya son escenario de manifestaciones contra la policía y el agente Darren Wilson, quien ejecutó al joven negro a href="URL_AGRUPADOR_163/michael-brown-a7290" rel="noopener noreferrer" Michael Brown/a en agosto de este año. Está previsto que en los próximos días el jurado de instrucción del Condado de San Luis, convocado desde el 20 de agosto, se pronuncie sobre si Wilson será condenado penalmente o absuelto.
El asesinato de Brown provocó fuertes tensiones con la policía y una ola de protestas y disturbios en Ferguson, donde más de la mitad de la población es negra y la mayoría de los policías son blancos. Por este motivo, el gobernador de Misouri Jay Nixon procuró adelantarse a los hechos y declaró ayer el estado de emergencia, activando el despliegue de la Guardia Nacional para asistir a la policía estatal y local.
Por el momento, las marchas han sido calmas, aunque el temor es que cobren violencia con el devenir de los días, en especial, cuando se dé a conocer la decisión del jurado. También hay reportes de prensa que indican que se infiltrarían manifestantes de Anonymous y grupos musulmanes, dado que Brown profesaba el islam, lo cual podría subir el tono de las protestas.
Los activistas que ya comenzaron a hacer demostraciones en la vía pública exigen la prisión perpetua contra Wilson. También piden al jurado que no descarten todos los cargos contra el agente policial y se convoque a juicio. La coalición "Don't Shoot" ("No disparen"), que reúne a más de 50 organizaciones, convocó protestas pacíficas en Ferguson.
La muerte de Brown, de 18 años, causó una ola de indignación a nivel nacional y mundial, al punto que el mismo presidente a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Barack Obama/a expresó su pesar. Según testimonios aportados por la Policía, Brown se enfrentó a Wilson y trató de arrebatarle el arma, y al negarse éste, le disparó. Mientras, la familia del joven y otros testigos dicen que estaba desarmado y alzando las manos en señal de rendición cuando Wilson le disparó.