La recuperación del dólar respecto de otras monedas de referencia internacional, como el euro, la libra y el yen, también tiene su réplica en las cotizaciones de las materias primas, entre ellas algunas que son cruciales para la economía de la Argentina: la soja y el petróleo.
La paulatina recuperación de la actividad económica en los EEUU obliga a los analistas a anticipar una reversión del ciclo de tasas bajas. El PBI norteamericano registró un aumento anualizado de 3,5% en el tercer trimestre de 2014, mientras que el desempleo bajó en octubre hasta el 5,8%, a un valor similar al registrado antes de la crisis financiera desatada a fines de 2007.
Que la Reserva Federal de los EEUU resuelva un gradual incremento de las tasas de interés de referencia significará mayores rendimientos para los bonos del Tesoro de los EEUU y una apreciación del dólar. Como contrapartida, se mantendrá la debilidad de precios de los bienes cotizados en esa divisa, como ocurre con las materias primas.
El dólar tocó el viernes su mayor valor en cuatro años frente a una canasta de monedas "duras". El euro se depreció en el año un 9,8% respecto de la moneda norteamericana (de u$s1,381 a u$s1,245), mientras que el yen llegó a caer a un mínimo de siete años contra el dólar. En Brasil, un destino vital para el comercio exterior argentino, el dólar repunta un 10,4% en 2014, desde los 2,359 reales del cierre de 2013 a los actuales 2,604 reales, su precio más alto en casi una década.
Pese a la baja del petróleo, entre enero y septiembre el déficit energético creció 71%
En ese contexto, la Argentina enfrenta un importante cambio de variables en el frente externo. Por un lado, su déficit comercial récord en materia energética empieza a moderarse en los últimos meses por las menores cotizaciones, pero a la par, el agro y sus industrias derivadas pierden divisas por el mismo motivo, con el agravante de que su incidencia en el total de comercio exterior argentino es mayor.
"Este
en Sudamérica. Vamos a tener un verano muy caliente, en función de una cuestión meramente internacional, regional y emergente. De sufrirse
en el ambiente doméstico, por
, hay que tener en cuenta que se van a desarrollar estos problemas por esas cuestiones externas más que por el año electoral", dijo
, de Fénix Report, a
.
El
según el
, con importaciones de
y energía por u$s11.415 millones y exportaciones por 5.252 millones de dólares. Según el balance cambiario del
, el
(exportaciones por u$s5.934 millones e importaciones por u$s12.412 millones).
Con datos de la Secretaría de Energía actualizados a septiembre de este año, se observa que la producción de hidrocarburos argentina sigue en baja: la de petróleo cayó un 1,5% frente a igual periodo del 2013, mientras que la de gas se redujo 0,5% interanual. La mejora en la producción de YPF aún no compensó el retroceso en la actividad de las explotaciones privadas.
El BCRA informó que al tercer trimestre de 2014, el déficit del sector energía ascendió a u$s7.652 millones (con importaciones por u$s10.775 millones y exportaciones por u$s3.123 millones). Este monto es 71,1% superior al rojo energético de u$s4.472 millones (exportaciones por u$s4.592 millones e importaciones por u$s9.064 millones) del período enero-septiembre de 2013.
En los últimos seis meses, los precios del petróleo en sus variedades WTI y Brent perdieron más de un 30% de su valor, a 75,64 y 79,31 dólares por barril, en sus mínimos en más de tres años.
La caída del precio del petróleo sólo incidió en las importaciones del tercer trimestre, que cedieron 6,9% respecto del período julio-septiembre de 2013, de u$s3.771 millones a u$s3.513 millones, aunque apenas atenuaron en el rojo total del sector. Probablemente, también se reduzca parte del déficit en este último trimestre del año.
Sin embargo, el bajón de los commodities afecta más a la Argentina por el agro, pues su peso en la balanza comercial duplica al de la energía: en nueve meses de 2014, el agro e industrias afines registraron exportaciones por u$s18.617 millones, según datos de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
La soja cae 24% en el año, pero el ingreso de divisas del agro se mantiene estable
Si bien los granos mostraron una apreciable recomposición de precios después de los mínimos del cierre de septiembre, la soja resta aún 24,4% en 2014 (de u$s469,89 por tonelada al cierre de diciembre a los u$s377,58); el maíz, un 10,4% (de u$s165,90 por tonelada a u$s148,61), y el trigo, un 8,8% (de u$s222,40 a u$s202,73).
"En la baja que se produjo de julio a septiembre, los fondos (de inversión) vendieron 26 millones de toneladas de maíz y 24 millones de soja y los precios cayeron 36 por ciento", explicó Dante Romano, de Austral Agroperspectivas, quein aclaró que estos inversores financieros solo "leen con anticipación" los fundamentos del mercado y "operan la tendencia, acelerando y profundizándola".
A pesar del retroceso de las cotizaciones, por exportaciones de granos y subproductos ingresaron desde enero al 14 de noviembre u$s21.608 millones, un 0,1% más que los u$s21.593 millones del mismo lapso de 2013.