La gubernamental estadounidense Administración de Información de a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Energía/a (AIE) recortó su previsión para el crecimiento de la demanda mundial de petróleo para este año en 120.000 barriles por día (bpd) quedando en 1,12 millones de bpd.
Además, la agencia estimó que la producción total de petróleo en Estados Unidos promedió los 8,9 millones de bpd en octubre y redujo su proyección para el próximo año en 100.000 bpd a 9,4 millones de bpd.
Por otro lado, la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) advirtió hoy de un posible déficit de crudo en 2040 si no se invierte ahora en la región de Oriente Medio, de la que se dependerá para la mayor parte del suministro.
En la presentación en Londres de su informe anual, Perspectivas para la energía mundial 2014, la directora ejecutiva Maria van der Hoeven avisó de que "las buenas condiciones actuales no deben hacer perder de vista los retos que se afrontan en el futuro".
Aunque actualmente no se pone en duda la oferta de petróleo, cuyo precio ha descendido a los 80 dólares por barril frente a la baja de la demanda, la Agencia señala que la "persistente inestabilidad" en Oriente Medio, y especialmente en Irak, amenaza la inversión y, en consecuencia, un adecuado suministro dentro de 25 años.
Según las proyecciones de la Agencia, en 25 años la demanda de crudo pasará de los 90 millones de barriles al día de 2013 a unos 104 millones de barriles, incremento pese a todo menor de lo esperado gracias a las medidas de eficiencia aplicadas por los países.
La demanda de petróleo, con ese crecimiento descendente, se volverá plana en 2040 y procederá principalmente de China -que superará a EEUU como principal consumidor en 2030- y después de la India y otros estados asiáticos.
Al igual que se frenará el crecimiento de la demanda de petróleo por una mayor eficiencia energética y un cambio de la a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" economía/a hacia sectores de menos consumo, también se reducirá el avance de la demanda global de energía, de acuerdo con la EIA.
Así, la demanda energética mundial crecerá un 37% de aquí a 2040, pero el crecimiento anual se irá reduciendo progresivamente de a dos puntos porcentuales anuales en los últimos veinte años a un 1,1% en 2025, según el informe.