El joven de Florencio Varela, Franco Ezequiel Casco (20), que había desaparecido hace 20 días, fue hallado muerto en el río Paraná y su familia reclama que el caso sea investigado como "desaparición forzada de persona".
Fue una "desaparición forzada de persona, así lo denunciamos y así consideramos que se debe iniciar la investigación", afirmó el defensor general de la provincia de Santa Fe, Gabriel Ganón, representante de la familia de Casco.
Los padres de la víctima reconocieron este viernes el cuerpo hallado por Prefectura Naval en el río Paraná, a la altura de la costa central de Rosario. Era su hijo, desaparecido desde el 7 de octubre.
"Hasta ayer era una búsqueda de paradero de persona, hoy con la aparición del cuerpo estamos trabajando en la hipótesis de un homicidio o un suicidio", dijo el fiscal del caso, Guillermo Apanowicz.
El médico forense del Instituto Médico Legal de Rosario, Raúl Rodríguez, sostuvo en conferencia de prensa que "hoy por hoy no se pudo precisar la causa de muerte" del joven.
El representante legal de la familia de la víctima dijo que "casi seguramente fue asesinado por Policías" y eso indica "que todas las circunstancias alrededor de este caso determinan la existencia de una desaparición forzada de persona".
Franco Casco, oriundo de Florencio Varela, llegó a Rosario para visitar a una tía que vive en el barrio Ludueña y el 6 de octubre fue a tomar el tren para regresar a su casa y le avisó a su madre que, al día siguiente, arribaría a las 8 a la estación porteña de Retiro, pero nunca llegó.
Según la investigación, el joven fue arrestado por personal de la seccional 7ma de Rosario, donde figura su ingreso con el apellido materno, Godoy. Fue la última vez que lo vieron con vida.
La Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) pidió "el apartamiento de la policía santafesina de la investigación". A su vez, desde el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) aseguraron que los testigos que aseguran haber visto a franco con vida durante los últimos días "fueron acercados a la fiscalía por la oficina de asuntos internos de la policía" e indicó que "la veracidad e intencionalidad de los testimonios aportados" por la fuerza de seguridad local "quedan bajo sospecha".
"Hasta el momento - aseguran - no se realizaron pericias claves sobre los móviles policiales ni se solicitaron las cámaras de seguridad de la zona, que ya han sido borradas. El tiempo perdido en la investigación condiciona el esclarecimiento del caso".
"El fiscal descartó la posible implicancia policial en la desaparición de Franco y delegó la investigación en la misma fuerza que lo detuvo y golpeó. Además, hasta el momento, no se realizaron pericias claves sobre los móviles policiales ni se solicitaron las cámaras de seguridad de la zona, que ya han sido borradas. El tiempo perdido en la investigación condiciona el esclarecimiento del caso", indicó el CELS en un comunicado.