El Consejo de la Magistratura podría convertirse en escenario de un escándalo, por una serie de maniobras internas sospechosas que lo pusieron bajo la lupa de la Justicia: investigan la licitación para una obra que nunca se hizo y a la vez hay varias acciones en la mira.
El tema cobró fuerza porque Mario Cimadevilla, uno de los consejeros del órgano constitucional, admitió que las denuncias por corrupción no parecen alejadas de la realidad: "En la Magistratura hay muchas contrataciones que dan que hablar y deben ser investigadas".
En declaraciones a InfobaeTV, el senador radical contó que había solicitado detalles de la licitación para la construcción de un edificio inteligente que se pagó, pero nunca fue levantado.
"Pedí que se informara sobre esta contratación y sobre otras, pero no he tenido suerte. Luego apareció la denuncia de Monner Sans por este inmueble de la calle Viamonte, que realmente nunca se hizo: en el lugar hay un baldío tapiado", confirmó el legislador.
"Yo creo que son cosas que se tienen que investigar. Lo cierto es que a mí me llamó la atención esto y pedí que se me informara, pero nunca me dijeron nada. Y dentro del Consejo nunca se explicó el tema", apuntó.
El representante de la UCR dobló la apuesta y reveló que "en la Magistratura hay contrataciones que dan que hablar, por ejemplo la del sistema informático (denuncian que el software elegido tiene serias deficiencias). Además el Consejo tiene juicios con algunas empresas por obras que no se han hecho, y algunas de esas mismas compañías hoy aparecen ofreciéndose para hacer otras cosas y son contratadas".
Consultado sobre quiénes son los responsables de este descontrol, Cimadevilla fue contundente: "La comisión de administración, que está integrada por los jueces federales. Siempre la presidieron ellos".
Para reforzar su denuncia, el senador opositor disparó contra los magistrados: "En el poder judicial muy pocos resisten un análisis patrimonial. Yo creo que si acá se investigara el patrimonio de la mayoría de los jueces, no sé si todos pasan el examen".
"La gente está harta de corrupción y nosotros podemos hablar de esto, porque las gestiones radicales pueden ser acusadas de muchísimas cosas, menos de haber sido corruptas", finalizó.