Ex guerrilleros colombianos que abandonaron las armas pidieron el miércoles perdón al papa Francisco por el daño que ha causado el conflicto armado, en una visita conjunta con una víctima de la larga disputa que ha dejado más de 200.000 muertos y millones de desplazados.
El Sumo Pontífice le pidió a los dos ex guerrilleros desmovilizados y a la víctima en el Vaticano que trabajen para que prosperen las negociaciones de paz que mantienen desde hace casi dos años las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) con el Gobierno del país sudamericano en La Habana, dijo la gubernamental Agencia Colombiana para la Reintegración en un comunicado.
"Hoy tuve la oportunidad de pedir perdón, por mí, por el grupo en el que estuve. Le pedí perdón al Papa, como se lo he pedido a mi país por el daño que pudimos causar", dijo, citada por la agencia, Cristina, de 35 años, que fue reclutada por la guerrilla cuando era niña.
La mujer abandonó la guerrilla en el 2006 y se sumó a un programa de desmovilización y reinserción del Gobierno que contempla capacitación y subsidios. Según cifras oficiales, más de 20.000 integrantes de la guerrilla y de grupos paramilitares de ultraderecha han dejado las armas en la última década.
"Tengo que decir que, muchas veces, son las víctimas que más han sufrido las que están más dispuestas a aceptar este perdón y reconciliarse", dijo la ex guerrillera, que estuvo acompañada de otro ex combatiente que dejó las armas en el 2007.
En la reunión estuvo presente una mujer que fue secuestrada, torturada, perdió a su primer esposo y a un hijo por el conflicto, precisó el jefe de la agencia gubernamental, Alejandro Eder, que también participó del encuentro.
"Sigan trabajando por la construcción de paz en Colombia", les pidió el papa Francisco.