Berni: "En la Argentina no tenemos problemas con los delitos mayores"

El secretario de Seguridad afirmó que la Argentina no sufre a las grandes bandas criminales. Sí admitió problemas con "motochorros" y "pequeñas entraderas". Criticó a la Justicia por el caso del "motochorro" que asaltó a un turista en el barrio de La Boca

Adrián Escandar 162

"En la Argentina nosotros no tenemos grandes problemas con delitos mayores, con las grandes bandas criminales. El problema que a la sociedad angustia son los motochorros, las pequeñas entraderas, los casos en los semáforos, cuando rompen vidrios para robar carteras. Y la Policía detiene y cada juez interpreta la ley como quiere", declaró Sergio Berni en diálogo con el periodista Antonio Laje en América 24.

El secretario de Seguridad dijo que le avergüenza la reacción de la Justicia en el caso del "motochorro" que fue filmado en el barrio de La Boca mientras intentaba asaltar a un turista canadiense y responsabilizó a la Justicia por no haber detenido al sospechoso.

"Fíjense que cuando nosotros detenemos a una persona robando, hay jueces que dicen que no es un robo porque el delincuente fue interceptado antes. Y eso es una tentativa y el delincuente queda en la calle y vuelve a delinquir. Hay delincuentes a los que detenemos dos o tres veces por mes", repasó.

El funcionario explicó que algunos sospechosos ni oponen resistencia cuando son detenidos porque saben que a las dos horas van a ser liberados. Además también puso el foco sobre el Servicio Penitenciario, que debiera preparar a los condenados para su reinserción social.

La semana pasada un turista canadiense difundió en redes sociales videos sobre su visita a la Argentina. Uno de los registros muestra un intento de asalto en el barrio de La Boca. El caso recorrió los noticieros más importantes del mundo y la víctima del episodio violento fue entrevistado por la cadena internacional CNN.

El fin de semana se conocieron declaraciones de la pareja del "motochorro", que aún continúa en libertad. Dos jueces distintos consideraron que no había motivos para retener al sospechoso, pese a los registros de la cámara y a sus antecedentes penales.