El gobierno argentino le solicitó al Bank of New York Mellon (BONY) que renuncie como intermediario de pago a los tenedores de títulos que entraron en los canjes de 2005 y 2010. El pedido fue realizado a través de una solicitada publicada este lunes en diarios locales.
El 30 de junio la Argentina depositó un pago para tenedores de bonos reestructurados en la cuenta que tiene el BONY en el Banco Central. La entidad financiera no giró los pagos a los bonistas por una orden de la justicia de los Estados Unidos. Ahora la Argentina propuso otros intermediarios a través de una nueva ley recientemente sancionada, denominada "de pago soberano".
Guillermo Nielsen fue secretario de Finanzas del Gobierno cuando Roberto Lavagna lanzó el primer canje de deuda. Su rol fue clave en la reestructuración de la deuda. En diálogo con el periodista Marcelo Longobardi en radio Mitre, el especialista aseguró que el BONY no tiene motivos para renunciar salvo que esté "hastiado" de la actitud argentina.
"El BONY tiene una orden judicial del juez (Thomas) Griesa que no pudo desobedecer. No es que no tiene capacidad para cumplir con el contrato. Tiene una orden judicial que le dice: usted no paga hasta que Argentina le pague a los holdouts. El Bony se volvió incapaz de actuar. Y ahora estamos yendo a que nos hagan un juicio y que los contribuyentes argentinos tengamos que pagar un juicio muy innecesario", declaró Nielsen.
El economista encendió luces de alarma sobre el pago que el Gobierno pretende realizar antes del 30 de septiembre a través de Nación Fideicomisos. Dijo que si se utiliza ese mecanismo, los fondos son embargables. Por eso, recordó, en 2005 habían elegido un mecanismo que establecía la obligatoriedad de depositar los fondos en una cuenta abierta dentro del BCRA.
"El 30 de septiembre la Argentina va a depositar la plata de la renta del bono par, pero va a poder pagar. Y esta vez es más grave porque no sabe a quién pagarle porque no tiene el software ni la información que hoy tiene el BONY", argumentó.
Este lunes la presidente Cristina Kirchner se reunirá con el magnate George Soros. Es uno de los principales accionistas privados de YPF y posee títulos que están en el limbo por el litigio con los holdouts. En las últimas horas trascendieron rumores que indicaban que el empresario tiene una propuesta para destrabar el conflicto.
La crisis de la deuda es el principal tema de la agenda de la Presidente en Nueva York, que el miércoles dará un discurso ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas. La expectativa también está puesta en posibles dichos sobre el pacto incumplido por Irán para indagar a los sospechosos de la causa AMIA.