Maduro denunció un nuevo complot de medios extranjeros

El presidente de Venezuela volvió a amenazar a CNN, NTN24 y el Nuevo Herald. Los perseguirá judicialmente por promover el "terrorismo psicológico"

Reuters 163

El presidente Nicolás Maduro denunció, el jueves, la existencia de una presunta conspiración contra su gobierno en la que estarían implicados medios extranjeros. "Venezuela, en las últimas horas, en los últimos días, ha recibido ataques que no habíamos visto en 15 años de revolución", dijo el gobernante en un mensaje a la nación transmitido por cadena de radio y televisión.

"Quizá muchos fueron víctimas de la campaña", que según Maduro desde la semana intentó infundir "terror psicológico" en la población, alimentando "la matriz de opinión" sobre la existencia de un virus desconocido supuestamente causante del fallecimiento de ocho personas en el Hospital Central de Maracay, ciudad ubicada a unos 150 kilómetros al oeste de Caracas.

En la víspera, las autoridades sanitarias informaron "no hay ningún virus extraño" en el país y recalcaron que, de los fallecidos en Maracay, "sólo dos pacientes presentaron chikungunya y tenían ambos enfermedades de base" que complicaron su cuadro clínico.

Se informó que los casos del virus de chikungunya en Venezuela ya suman 398, de 1.239 casos sospechosos, y además se contabilizan 45.745 casos de dengue en el país.

El mandatario acotó: "(Desde el 11 de septiembre) comenzó una campaña internacional, lo denuncio, por CNN en español, que es un laboratorio de mentiras y de guerra psicológica y basura contra el país; por un canal de televisión basura financiado por el paramilitar (el ex presidente colombiano Alvaro) Uribe, NTN24; por el Miami Herald o llamado Nuevo Herald, que es el periódico de Miami, depositario de todas las mentiras contra Venezuela que envenenan a importantes grupos de venezolanos que viven en la Florida".

"Estoy pensando en acciones internacionales de carácter judicial contra CNN, porque no puede ser impune, que una empresa que actúa en los Estados Unidos, en Atlanta, desde allí digan de nuestro país cualquier cosa... Esto se tiene que acabar. Le he dicho al procurador y a un conjunto de juristas que preparemos acciones judiciales", insistió.

"No podemos banalizar toda la guerra que se nos está haciendo", enfatizó. "Comenzaron una campaña por Twitter, respaldada en Venezuela por el presidente del Colegio de Médicos... y también periodistas por Twitter sacando fotos horribles, horribles, diciendo que en (el estado) Aragua había arrancado un virus que estaba matando a decenas de venezolanos, que habían muerto en las últimas horas el hospital Central de Maracay, que no dejaban entrar al hospital, que el virus no se sabía si era el ébola u otro tipo de fiebre", dijo Maduro al desmentir la veracidad de esas imágenes.

El virus de chikungunya rara vez resulta fatal. Las personas infectadas, por lo general, sufren fiebre, fuertes dolores e inflamación de articulaciones, dolores musculares y de cabeza, o sarpullido. Los pacientes suelen recuperarse en aproximadamente una semana, aunque algunos sufrieron dolores de articulaciones a largo plazo. No existe vacuna ni tratamiento específico para la enfermedad. Los primeros 57 casos de chikungunya en Venezuela fueron reportados oficialmente en julio pasado.

Maduro -a semejanza de su predecesor, el ahora fallecido presidente Hugo Chávez, en sus 14 años de gobierno- ha mantenido relaciones btirantes con los principales medios venezolanos y extranjeros, a los que acusa de difundir "mentiras" sobre su gestión y conspirar para derrocarlo.

Las denuncias de golpes y conspiraciones fallidas contra el Gobierno son parte del discurso gubernamental desde la llegada de Chávez al poder en 1999. Un estudio del diario caraqueño Últimas Noticias dio cuenta de 63 supuestos complots para asesinar a Chávez entre 1999, el año en que llegó al gobierno, y su muerte en marzo de 2013. Desde entonces, las denuncias se han hecho más frecuentes todavía. El gobierno venezolano ha informado de más de una docena supuestos complots desde que Maduro fue elegido presidente en abril de 2013, según un recuento de la Associated Press.

Mientras que el gobierno de Chávez tendía a culpar a la CIA o a oscuras agrupaciones, el de Maduro generalmente responsabiliza a figuras de la oposición.