Tras la decapitación de David Haines, un ciudadano británico que colaboraba en un campo de refugiados en Siria, a manos del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) el gobierno del Reino Unido empezó a dedicar más recursos para encontrar a "John", el yihadista que, además ejecutó a los periodistas estadounidenses James Foley y Steven Sotloff.
"El asesinato de David Haines es un acto de pura maldad (...) Cazaremos a aquellos responsables y los traeremos a la justicia sin importar cuanto tiempo nos tome", declaró el primer ministro británico David Cameron, quien definió a Haines como un héroe y al ISIS como "monstruos".
Inicialmente se creía que la identidad de "John" era Abdel-Majed Abdel Bary, un británico que dejó su hogar para luchar con el ISIS, pero oficiales aparentemente lo descartaron y se están concentrando en otro hombre, cuya identidad no ha sido publicada, según informa el Daily Mail. Se estima que el terrorista viajó de Londres a Siria el año pasado.
Los servicios de seguridad de Inglaterra, que han afirmado que "John" es "hombre muerto", se encuentran realizando numerosos análisis de sus videos para encontrarlo, estudiando su lenguaje corporal, forma de hablar y arma en un desesperado intento por confirmar su identidad.
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En una operación dirigida por fuerzas especiales estadounidenses antes de la aparición del video de la ejecución Foley, se llegó a uno de los posibles escenarios de las decapitaciones, pero los terroristas ya se habían retirado del lugar. Se reporta también que el presidente Barack Obama aprobaría un ataque aéreo si se supiera el paradero de "John".
En este momento cientos de miembros de las fuerzas especiales británicas se encuentran trabajando en la región con soldados iraquíes y kurdos para ubicar a "John" y liberar a los rehenes que tenga en su poder. "Estamos poniendo muchos recursos. Hay tecnología sofisticada, reconocimiento de voz y cosas así que pueden ser usadas para determinar quienes son estas personas", declaró el embajador Peter Westmacott.