El diario Haaretz subraya que la Cancillería considera que el despliegue, que podría incluir fuerzas europeas, podría servir a los intereses de Israel si desarrolla con efectividad su labor en materia de seguridad.
El medio da cuenta de un documento de dos páginas titulado "Principios y Parámetros del Despliegue de una Fuerza Internacional en Gaza", que habría sido entregado a los ministros del Gobierno días antes de que concluyera el conflicto en la Franja palestina.
Hasta la fecha, el Ejecutivo no se ha reunido para analizar el borrador, en cuya elaboración intervino un equipo integrado por diez personas, precisa el rotativo de Tel Aviv.
Las ideas contenidas en el mismo fueron formuladas en línea con propuestas trasladadas durante la guerra en Gaza por Alemania, Reino Unido y Francia, entre otros actores comunitarios, que sugirieron el establecimiento de una fuerza internacional de observación en la Franja, en base a una similar desplegada en la terminal de Rafah entre 2005 y 2007.
El borrador presenta cuatro alternativas: una fuerza de la Unión Europea (UE); un destacamento de países occidentales además de europeos, que incluya la participación de EEUU, Canadá, Australia y Nueva Zelanda; una fuerza de la ONU o una de la OTAN.
Se recomienda que el despliegue de la fuerza sea en la parte palestina de Rafah -en el sur de la Franja- y a lo largo de la frontera con Egipto, así como en instalaciones de la ONU.
Y sobre su mandato y marco legal, Exteriores aconseja que su creación se haga en el marco de una resolución del Consejo de Seguridad, o mediante un acuerdo entre Israel, la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Egipto, EEUU y la UE, y cuente con el respaldo de una resolución de la ONU.
El plazo recomendado de la misión sería de un año con opción de extenderse otro adicional, y señala como precedente a seguir a la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (FINUL), lo que significa que todos los actores involucrados, Israel, los palestinos y Egipto, deberían estar de acuerdo con su despliegue.