Mia, una niña de tres años que fue golpeada y abusada por su madre y padrastro en Berisso, permanece internada en terapia intensiva en el Hospital de Niños de la Plata y su estado es grave. De acuerdo con el último parte médico, presenta hematomas en todo el cuerpo, que predominan en su cara, el dorso, brazos, pelvis y ambas caras laterales del fémur proximal. Tiene lesiones genitales y fractura de cúbito y radio de lado izquierdo. Además, entre varias cosas, tiene fractura de las costillas de lado derecho, líquido abdominal y lesión en el riñón.
Ante este diagnóstico, Roxana Alegre, la abuela de la menor, habló de su hija (madre de la nena) y no dudó en calificarla como un "monstruo". "Es una vergüenza para mí, yo no puedo decir que es mi hija, porque yo amo a mis hijos con locura", dijo la mujer en diálogo con Crónica. El violento episodio ocurrió hace dos días, cuando una mujer de 21 años, identificada como Cecilia Cabrera, entró al Hospital Larraín, con su hija de 3 años en grave estado. Tras ser atendida en la guardia se la derivó al Hospital de Niños Sor María Ludovica por la gravedad del cuadro clínico que presentaba. Horas más tarde se supo que la joven y su pareja, Sergio Argañaraz, eran los artífices del horror vivido por Mia.
"Lo que le hicieron estos monstruos fue un desastre. Le pegaron, le hicieron de todo, está muy mal. La nena se descompensó, según los vecinos, un día antes. La tuvieron muerta en la casa y como durmió tanto, le dieron de comer para que se despierte. Le pusieron los dedos en la boca para que coma de prepo, allí le agarró una convulsión y llegó con un paro respiratorio al hospital de Berisso, ahí la revivieron y la trajeron al Hospital de Niños", relató la abuela, aún conmocionada por la situación de su pequeña nieta.
Roxana contó que desde la Justicia "les pidieron todo tipo de pruebas para este caso". "Les llevamos fotos y le decíamos a los abogados lo mal que la trataban a la nena en la casa de mi hija. Mis otros hijos más chicos fueron a su casa, y veían que la nena siempre tenía moretones en la cara y en los brazos", explicó.
De hecho -dijo- varios vecinos del barrio se quejaban de los gritos y maltratos que rondaban en la humilde vivienda: "Hay un vecino que no quiere dar su identidad, porque tiene un hijo discapacitado y tiene miedo, que me comentó que el maltrato era constante. Además de escuchar los golpes que le daba a la nena".
Sobre el padrastro de la criatura, Alegre dijo que "es un tipo violento y borracho. Una vez amenazó con golpearnos a todos y ahora mi nieta está en riesgo" y contó que "la destrozaron a la nena". "Tengo fe de que va a salir adelante", agregó. Los golpeadores están detenidos y acusados de "abuso sexual agravado con tentativa de homicidio".