La jueza Susana Barrientos, a cargo del caso presentado por el chavismo contra el opositor Leopoldo López y cuatro estudiantes por las protestas antigubernamentales, rechazó el pedido de la defensa para admitir el testimonio de 60 personas y otras pruebas.
"Ha dicho que no es su competencia, que si ya el juez de control había negado las pruebas, dice que ella no puede recibirlas, salvo que las Corte de Apelaciones en las próximas horas se lo ordene", afirmó el abogado de López, Juan Carlos Gutiérrez, a los periodistas congregados a la entrada del tribunal.
En la audiencia preliminar del pasado 5 de julio, un tribunal consideró que la acusación contra López debía ir a juicio y, según la defensa, rechazó la incorporación de las pruebas presentadas como respaldo al dirigente de Voluntad Popular. Esa decisión fue apelada días después por los abogados de López y todavía se encuentran a la espera de respuesta.
"Nos mantenemos muy atentos, ya que es posible que en los próximos momentos se emita decisión de la Corte de Apelaciones", apuntó Gutiérrez y agregó que, sin esas pruebas, el juicio se convertiría en "un monólogo de la Fiscalía". Precisó, además, que la próxima audiencia se realizará el 28 de agosto "inalterablemente".
López está procesado por instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio, por los hechos violentos que se produjeron al término de una marcha el 12 febrero y que se saldaron con tres muertos y decenas de heridos y detenidos. Ese día se inició una ola de protestas en el país contra el gobierno de Nicolás Maduro que se extendió cuatro meses y que dejó un balance oficial de 43 muertos y cientos de heridos.
El opositor está siendo juzgado junto con los estudiantes Ángel González, Damian Martín, Marco Coello y Christian Holdack: los dos primeros, por instigación para delinquir; y los otros dos, por instigación pública, incendio, daños y agavillamiento.
El juicio, que comenzó el pasado 23 de julio, tuvo su segundo episodio el pasado 6 de agosto, cuando fue diferido por primera vez por una "pequeña confusión" relacionada con la presentación en el tribunal de tres de los estudiantes.
En Twitter, la esposa de López, Lilian Tintori, denunció la decisión de la jueza Barrientos y lamentó que tuviera que volver a darles la noticia a sus hijos de que su padre continuaría en prisión, después de seis meses recluido en Ramo Verde.