La trágica muerte de a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Eduardo Campos/a, candidato presidencial del Partido Socialista (PSB), conmueve a todo Brasil. La avioneta en la que se trasladaba en el marco de la campaña electoral se estrelló hoy. Murieron él y sus asesores en el acto. Con su fallecimiento, la política brasileña se encuentra ahora ante un escenario incierto, dado que faltan menos de dos meses para que se celebren las elecciones.
¿Cómo seguirá la carrera presidencial? El periodista Marcelo Rech, del Instituto de Relaciones Internacionales de Brasil (a href="http://www.inforel.org/" rel="noopener noreferrer" target="_blank"InfoRel/a), explicó a Infobae que la ley electoral establece un plazo de 10 días para definirlo y señaló que hay dos escenarios posibles. Por un lado, el PSB -aliado con el espacio político Red de Sostenibilidad- podría retirarse de la contienda electoral.
No obstante, Rech consideró que la opción más viable es la segunda: que Marina Silva, la candidata a vicepresidente de Campos, ocupe su lugar y se postule para el Ejecutivo. "Es la persona más adecuada. En 2010, ella supuso una verdadera amenaza para la elección de Dilma Rousseff", apuntó.
De acuerdo con el especialista, el PSB no tiene otra figura con presencia a nivel nacional, como lo era Campos, por lo que su sucesor en la fórmula no puede ser alguien de ese partido. Los comicios son el 5 de octubre y ya no hay tiempo para que otro candidato sea conocido en un país de las dimensiones de Brasil.
"Y tampoco podría pasar como en Venezuela, que Nicolás Maduro capitalizó los votos por la conmoción de la muerte de Hugo Chávez", agregó, aunque aclaró que los socialistas se verán beneficiados de todas formas por el factor emocional.
Campos estaba tercero con un 8% de intención de voto en las encuestas, detrás del también opositor Aécio Neves y de Rousseff, que parte como favorita, aunque en las últimas semanas había sumado más apoyo en los sondeos.
Rech trabajó anteriormente con Campos y con su abuelo Miguel Arraes, recordado en Brasil por haber luchado contra el régimen militar. "Él llegó siendo muy joven al Congreso. Cuando lo conocí, creí que no llevaba las cosas muy en serio, que estaba ahí porque su familia era de política. Pero en los 90 demostró su capacidad cuando fuea href="hhttp://www.infobae.com/2014/08/13/1587413-eduardo-campos-una-carrera-pernambuco-brasilia" rel="noopener noreferrer" elegido y reelegido gobernador de Pernambuco/a", afirmó.
"Hace unas semanas hablé con él. Sabía que era difícil llegar a la presidencia esta vez, pero su proyecto era hacerse conocido nacionalmente para postularse en 2018. Desde los 90 sabía que quería ser presidente de Brasil e hizo una carrera política impecable. Llevaba mucho tiempo preparándose", lamentó.