Según el embajador suizo ante la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), Thomas Greminger, cuyo país presidente el organismo este año, "grupos locales, ilegales y armados" impidieron el pleno acceso al lugar a los observadores. Un grupo de 21 enviados de la OSCE estuvieron esta tarde durante 75 minutos en el lugar del accidente, donde se produjeron además varios disparos al aire por parte de los rebeldes, agregó el diplomático helvético.
La OSCE, un organismo multilateral de seguridad para Europa, pidió en una resolución adoptada hoy que una investigación internacional del accidente del avión malasio, supuestamente derribado en el este de Ucrania, no sea obstaculizada. La OSCE "llama a todos los Estados adheridos y otros actores", en aparente referencia a las milicias prorrusas en la zona, "a no interferir con una investigación internacional del siniestro".
El documento, adoptado por consenso entre los 57 países adheridos a la OSCE, incluidas Ucrania y Rusia, los dos países enfrentados en el conflicto, se suma a los llamamientos a una "investigación abierta, transparente e independiente" del siniestro.
Tras un día entero de intensas deliberaciones, los países de la OSCE adoptaron este texto en un sesión especial del llamado Consejo Permanente, en el piden que el lugar del accidente sea preservado como está para hacer posible una investigación de lo sucedido.
"Instamos a todos aquellos en la zona a preservar el sitio del accidente intacto, incluyendo no destruir, remover ni manipular el fuselaje, equipamiento, escombros, pertenencias personales o resto", señala la resolución de la OSCE.
El avión Boeing 777 de Malasya Airlines, que cumplía el recorrido Ámsterdam-Kuala Lumpur el jueves, fue alcanzado por un misil tierra-aire cuando atravesaba el espacio aéreo del este de Ucrania. En el vuelo viajaban 298 personas, entre ellos, 80 niños.