Miles de personas coparon el estadio Santiago Bernabéu a la espera de que se abriera la capilla ardiente para último adiós a Alfredo Di Stéfano, legendario jugador del Real Madrid fallecido a los 88 años. La huella que Di Stéfano dejó en el Real Madrid se está nota con la gran expectación y respeto que su muerte generó desde primera hora de la mañana.
Antes de que se abrieran las puertas del palco de honor del Santiago Bernabéu, cientos de personas aguardaban impacientes para brindar su despedida a Di Stéfano, un jugador que marcó al madridismo por su carácter, su garra y su trayectoria deportiva plagada de éxitos con la camiseta blanca.
El primero en llegar al estadio fue el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, que ejerció de anfitrión con todos las personalidades e incluso se fotografió con algunos aficionados que se lo pidieron. Junto a Florentino estuvo también ejerciendo de anfitrión en todo momento Emilio Butragueño, ex futbolista y actual director de Relaciones Institucionales del club.
El féretro de Di Stéfano está tapado con una gran bandera blanca y la sala que luce dos fotos suyas
De los primeros en llegar, antes de las once de la mañana, fueron la delegada del Gobierno en Madrid Cristina Cifuentes, el entrenador de fútbol José Antonio Camacho, el ex secretario de Estado para el Deporte Jaime Lissavetzky y el presidente del Comité Olímpico Español (COE) Alejandro Blanco.
Todos ellos dieron un emocionante pésame a la familia de Di Stéfano y compartieron unos minutos con los más allegados a La Saeta Rubia, cuyos restos en el féretro tapado están cubiertos con una gran bandera blanca en una sala que luce dos fotografías de gran tamaño, una reciente y otra antigua, junto a las cinco Champions League logradas en su etapa de jugador.
Emocionante fue el momento del último adiós para el actual jugador madridista Dani Carvajal, que el 12 de mayo de 2004 colocó junto a Di Stéfano la primera piedra de la Ciudad Deportiva de Valdebebas.
Poco después de marcharse Carvajal hicieron acto de presencia los capitanes Sergio Ramos e Iker Casillas, que aparcó sus vacaciones para acercarse al estadio Santiago Bernabéu y despedirse de un hombre que, según dijo, "todo de él recuerda al Real Madrid".
"Gracias, Alfredo Di Stéfano", dice uno de los muros donde se lleva a cabo el velatorio
José Ignacio Wert, ministro de Educación, Cultura y Deporte, llegó después y, tras dar el pésame a la familia madridista por la pérdida del mito blanco, declaró ante la prensa que Di Stéfano ha sido "el futbolista más grande que se ha conocido".
En la misma línea se mostró la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que destacó que Di Stéfano "llevó el nombre de la ciudad por el mundo" y avanzó que en uno de los próximos plenos municipales propondrá dedicar un espacio público en Madrid al legendario "Don Alfredo".
También se personó en el estadio madridista Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid; Gabi, capitán del primer equipo, y José Luis Pérez Caminero, director deportivo del club. Los tres fueron recibidos por Florentino Pérez y departieron durante unos minutos con los familiares de Di Stéfano.
Los admiradores de Di Stéfano podrán acercarse al estadio Santiago Bernabéu hasta las 19 GMT, cuando se cierre la capilla ardiente
Algunos compañeros de vestuario en el Real Madrid como Amancio Amaro o José Emilio Santamaria se mostraron emocionados al recordar la figura de Alfredo Di Stéfano, destacando ambos la "generosidad" que transmitía.
Entre tanto, la ola de aficionados madridistas y admiradores de Alfredo Di Stéfano sigue sin cesar y así seguirá hasta las 19 GMT, cuando se cerrará hoy la capilla ardiente.