La última semana Sting, ex líder de The Police, reveló al periódico inglés The Sunday Times que dejará a sus hijos sin herencia, ya que el músico sostiene que "tienen que trabajar".
La fortuna del artista, quien figura entre los diez compositores más ricos del mundo, está estimada en unos 302 millones de dólares.
Sin embargo, Sting no es el único que ha optado seguir este camino. El ex cantante de The Police se suma así a una larga lista de famosos que eligieron destinar sus fortunas a fines benéficos, en lugar de asegurarles el futuro a sus respectivas familias.
Uno de los casos más conocidos es el del multimillonario Bill Gates. El fundador de Microsoft ostenta una fortuna de 77 mil millones de dólares, pero una vez que ya no esté, sus hijos recibirán "tan sólo" diez millones.
Caso similar es el de Warren Buffett, otro de los más famosos millonarios del planeta. El dueño del holding Berkshire Hathaway decidió donar más del 85% de su fortuna valuada en 59.700 millones de dólares a la fundación de Bill y Melinda Gates.
"Si mueres no debes dejar una gran cantidad de dinero a tus hijos. Solo les arruinarías la vida". Esas fueron las palabras de Steve Jobs, cofundador de Apple, en una entrevista que concedió tiempo atrás en 1985.
Para el famoso cineasta George Lucas, creador de la saga Star Wars, la mejor herencia que un padre puede dejar a sus hijos es la educación. Por eso, decidió dejar un mínimo porcentaje de su fortuna, que está estimada en unos 7.300 millones de dólares.
Ted Turner, fundador del imperio mediático CNN, es otro de los nombres que integran esta larga lista. Con una fortuna que ha alcanzado los diez mil millones de dólares, Turner, antes de dejar resuelta la vida a sus hijos, optó por donar unos mil millones para programas de filantropía de las Naciones Unidas.