El comandante de la Policía en Nariño (departamento al que pertenece Tumaco), coronel Hugo Henry Márquez, relató al diario El Tiempo que los dos menores actuaron por encargo de la Columna Móvil Daniel Aldana, una unidad de las FARC muy activa en los últimos meses en esa zona del país.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, expresó su "enfática condena" a este hecho y aseguró que "tarde o temprano" los responsables de este crimen "caerán, serán llevados a la Justicia y condenados, porque tarde o temprano caen los delincuentes".
"Utilizar menores de edad en la guerra es un crimen de guerra, que no se les olvide a las organizaciones criminales", dijo Santos en un acto de graduación de adultos alfabetizados en Santa Marta, capital del departamento caribeño de Magdalena.
Los menores víctimas de este acto de la guerrilla fueron identificados como Luis Sebastián Preciado, que murió en el acto a consecuencia de la onda explosiva y las esquirlas, y Ángelo Cabezas Pierre, quien, según la Policía, lanzó el artefacto y falleció en la noche del miércoles en el Hospital San Vicente de Tumaco.
Producto del ataque, ocho oficiales resultaron lesionados, según los reportes policiales. La candidata conservadora a la presidencia de Colombia, Marta Lucía Ramírez, criticó que el Gobierno no pusiera como condición el fin del reclutamiento infantil para negociar con las FARC en Cuba y dijo que mientras los guerrilleros "están en una playa en Varadero", mandan a niños a "morir como bombas humanas".
Desde la redes sociales, la Sociedad Colombiana de Pediatría convoca para este miércoles 21 de mayo a una movilización en repudio al uso de niños bomba por parte de guerrilleros de las FARC.