Huawei busca ampliar su presencia en el mercado de smartphones con su nuevo teléfono insignia: el Ascend P7, sucesor del Ascend P6, que presentó a mediados del año pasado. Durante el primer trimestre del año, la compañía retuvo el tercer lugar entre los fabricantes más vendedores del rubro, con una cuota de 4,9%, según cifras de la consultora IDC.
Una de las características más sobresalientes del nuevo smartphone de la empresa china es su delgadez: tiene un grosor de tan solo 6,5 milímetros, lo que lo hace más fino que el Galaxy S5, de Samsung (con 8,1 milímetros), y que el iPhone 5S (con 7,6 milímetros).
El Ascend P7 viene con pantalla de 5 pulgadas con resolución 1080p y Gorilla Glass 3. Una capa de este vidrio también recubre la parte trasera del teléfono.
Huawei también puso el foco en la cámara frontal de su nuevo dispositivo, orientada a los amantes de las "selfies" y, más específicamente, a lo que la empresa denominó "groufie": selfies grupales. La cámara tiene un sensor de 8 megapíxeles y una función especial para tomar imágenes panorámicas. Además, viene con una herramienta para optimizar las imágenes de los rostros.
La trasera cuenta con un sensor Sony de 13 megapíxeles con flash LED que permite grabar videos en Full HD.
En su interior, el Ascend P7 viene equipado con un procesador de cuatro núcleos 1.8GHz, 2GB de RAM y espacio de almacenamiento de 16GB, expandible a 32GB mediante tarjeta microSD. Corre Android 4.4.
El nuevo teléfono insignia de Huawei viene con batería de 2.500mAh e incorpora conectividad NFC, Bluetooth 4.0 y LTE. En esta última modalidad, el Ascend P7 promete hasta 404 horas en standby y hasta 14 horas de voz.
Sus medidas son 139,8 x 68,8 x 6,5 milímetros y se lo puede elegir en colores blanco, negro y rosa. Huawei lanzará inicialmente su nuevo smartphone en alrededor de 30 mercados de Europa y Asia, a los que les seguirán otros países. Se venderá por €449.