El nivel de actividad económica sería este año "sensiblemente más débil" que el registrado en 2013 "como consecuencia de años de elevada inflación heredada", auguró un informe dado a conocer por la consultora Economía y Regiones (E&R).
En ese marco, la consultora advirtió el miércoles que "hasta tanto no se reduzca en forma sustentable y sostenida la inflación, Argentina no volverá a crecer a tasas (5%/6%) que permitan generar empleo privado genuino". "Bajar fuertemente la inflación es condición necesaria (no suficiente) para volver a generar puestos de trabajo genuinos en la esfera privada y crecer sustentablemente en el largo plazo", planteó.
Según el análisis, la teoría económica y la evidencia empírica "demuestran que los niveles elevados de inflación sostenidos durante largos períodos terminan reduciendo la tasa de crecimiento en largo plazo".
"Las políticas de estimulación de la demanda agregada generan tasas de crecimiento elevadas en el corto plazo, a costa de provocar una aceleración de la inflación (Argentina 2003 / 2007), que termina impactando negativamente en la tasa de crecimiento estructural de la economía en el largo plazo (Argentina 2008 / 2014)", explicó.
El informe destacó que Argentina "no tiene los niveles de ahorro e inversión que se necesitan para crecer a un promedio de 8.5%/9.2% anual como se registró en 2003 / 2007".
En ese contexto, la consultora sostuvo que es necesario "bajar las expectativas de inflación para que el aumento del nivel general de precios se desacelere y haya probabilidades de crecer a mejor ritmo y generar empleo privado genuino".
"Mayores expectativas de inflación son menor confianza del consumidor y por ende menos consumo, más baja inversión y menor nivel de actividad global", afirmó. Para bajar las expectativas inflacionarias, E&R dijo que se necesita "cambiar el sesgo de la política fiscal y de la política monetaria", para que sea "más austera".
"Con fundamentos fiscales, monetarios y cambiarios más sólidos, habrá mayor confianza del consumidor y nivel de actividad. Por el contrario, si el déficit y la dominancia fiscal continúan con su trayectoria ascendente, el Banco Central se vería obligado a colocar más LEBACs a mayor tasa de interés, afectando en forma negativa al nivel de actividad", concluyó.