Diez migrantes sudaneses murieron en el desierto entre Libia y Sudán y más de 300 fueron rescatados por el ejército luego de haber sido abandonados por traficantes en esta zona, indicó este miércoles el Ministerio de Defensa sudanés.
"Diez de ellos murieron y el estado de salud de los otros está comprometido. Se los está atendiendo y transfiriendo a (la ciudad de) Dongola", escribió el Ministerio en un comunicado.
"Estaban yendo hacia Libia como inmigrantes ilegales"
"Estaban yendo hacia Libia como inmigrantes ilegales", precisó a la AFP el vocero del Ejército, Sawarmi Jaled.
"Los traficantes los dejaron en el desierto (...) en la frontera entre Sudán y Libia", agregó, al tiempo que afirmó que las diez personas fallecidas eran todas sudanesas.
Los demás son de varias nacionalidades, incluyendo etíopes, eritreos, paquistaníes y bangladesíes, según el vocero.
El Ministerio indicó, en su portal internet, que el total de personas abandonadas se elevaba a 319 y que tropas conjuntas sudanesas y libias habían llevado a cabo el rescate.
El territorio donde ocurrió el incidente es una región poco poblada que va desde el este de Sudán hasta la península del Sinaí en Egipto, lugar de paso de numerosos africanos que buscan escapar de la miseria.
Libia amenazó, en 2012, con bombardear por aire a cualquier persona que entrara en el país de manera irregular a través de las fronteras del sur, con el objetivo de combatir la a href="http://www.infobae.com/temas/inmigracion-a579" rel="noopener noreferrer" inmigración/a clandestina.