El premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa llegó la noche del miércoles a Caracas para participar en la celebración del 30° aniversario de Cedice -un respetado centro de divulgación del pensamiento liberal en Venezuela-, pero su viaje ha sido considerado por el Gobierno una provocación.
De acuerdo con el diario español El País, a pesar de que se trata de una figura de prominencia mundial, los medios del Estado y los radioeléctricos de gestión privada han derrochado esfuerzos para pasar por alto la presencia del escritor en el país.
La principal televisora oficial, Venezolana de Televisión, se las arregló para no mencionarlo. Desde el website Aporrea.org, un portal informativo y de opinión no oficial que suele reflejar las posiciones del ala izquierda del chavismo, se llamaba al autor el "guarimbero mayor", al tiempo que difundía un comunicado en repudio a la visita, suscrito por "periodistas populares y revolucionarios".
"No he venido a provocar a nadie", aclaró el jueves el escritor, y agregó: "Vengo a decir lo mismo que digo en mi país o en España".
Vargas Llosa ha llegado a un país en plena transformación, cuando el oficialismo, comandado por Nicolás Maduro, atraviesa las manifestaciones opositoras más importantes de los últimos años, que lo han obligado incluso a abrir una mesa de diálogo con la oposición.
En ese contexto, el Nobel ha sido recibido por los sectores de oposición, incluyendo a los más insurreccionales, como un refuerzo moral que viene a aportar nuevos bríos y mayor visibilidad a su lucha.
"Sus muertos, sus torturados y sus luchas son también nuestras; les expresamos nuestra gratitud"
Durante su visita, el escritor ha señalado su interés por el movimiento estudiantil que encabeza las protestas opositoras. El jueves, el autor de Conversaciones en la Catedral y La guerra del fin del mundo sostuvo dos reuniones con dirigentes estudiantiles, de acuerdo con El País.
"Sus muertos, sus torturados y sus luchas son también nuestras; les expresamos nuestra gratitud", fueron las palabras que Vargas Llosa dedicó a los estudiantes venezolanos durante una rueda de prensa previa al foro conmemorativo de Cedice.
En todas sus presentaciones públicas, Vargas Llosa ha insistido en la liberación de Leopoldo López, como también lo hizo con María Corina Machado, la diputada de oposición que, después de perder su fuero parlamentario, enfrenta una amenaza de prisión.
"Maduro y Diosdado Cabello no son los rostros de Venezuela ante el mundo", aseguró el escritor en referencia a los dirigentes máximos del oficialismo, "sino López y Machado".
A pesar de que en el pasado el régimen chavista no ha dudado en expulsar del país a personajes que no fueron de su agrado, como la democristiana peruana Lourdes Flores y José Miguel Vivancos, director de la organización Human Rights Watch, las autoridades parecen tener en claro que no les es posible llegar tan lejos con Vargas Llosa.