Tras mantener una serie de videoconferencias en el marco del lanzamiento del programa "Pampa Azul, el conocimiento científico al servicio de la soberanía nacional", Cristina Kirchner criticó a los medios por "mostrar un país diferente al real". Según la mandataria, la televisión "agita determinadas cuestiones para bajar el ánimo de la gente" y deja de lado otras, como "el récord de turismo de Semana Santa".
"Una amiga fue a Nueva York y me dijo que los aviones venían repletos de argentinos. En el país todas las plazas turísticas tuvieron plena ocupación, pero en las pantallas de televisión nos quieren mostrar un país diferente", afirmó la Presidente, y agregó: "Hasta el que veranea a veces se lo cree. Se deberían preguntar: '¿Si todo es tan horrible qué hago acá en Mar del Plata o en Nueva York?'".
"Por eso, a todos los que tienen la suerte de tener todas estas cosas, les pido que antes de dejarse llevar por lo que le plantean en la caja boba, que no sean bobos ellos y piensen cómo estábamos en el 2003 y cómo estamos ahora. Con eso me alcanza y sobra", agregó al respecto.
Luego, apuntó contra "algún sector económico o empresarial, que jugó un rol en los 90". Para Cristina Kirchner, se trata de grupos a los que "nunca se les escuchó una autocrítica". Consideró que son sectores que "viven pidiendo la renovación de la clase política", pero "ellos son todos los mismos de siempre".
En otro tramo de su discurso, defendió su gestión, pese "al boicot de adentro y de afuera" y dijo que su Gobierno le dejará "un país mucho mejor al próximo presidente". Finalmente, la mandataria reconoció falencias de su gestión con una frase irónica. "No vivimos en Festilindo, pero tampoco es posible vivir en Festilindo". Por último, recordó las crisis económicas que viven otros países del mundo.