Las primeras máquinas expendedoras automáticas de productos de marihuana en Colorado están dotadas de alta tecnología, que permite a la gente comprar más rápido el cannabis pero también dejarlo lejos del alcance de los menores. Según sus creadores, sus bondades radican en que mantiene el producto fresco y reduce el robo por parte de los empleados de los dispensarios.
Por el momento, el aparato estará orientado sólo al uso exclusivo de los pacientes que recurren a la marihuana con fines medicinales. En Colorado, esta sustancia es legal desde el 1° de enero de este año y hay coffee-shops donde es posible consumirla con motivos recreativos.
La primera máquina será instalada en el dispensario Herbal Elements, en Eagle-Vail. Su funcionamiento es sencillo: la persona autorizada para comprar marihuana debe colocarse frente a una cámara y mostrar su carnet de conducir. Una vez identificado mediante un sistema informático, el interesado introduce el dinero y recibe el producto.
Colorado y Washington son los únicos dos estados de los EEUU donde el consumo recreativo de cannabis es legal, aunque en otros puntos del país, como por ejemplo en la ciudad de Nueva York, el uso medicinal está autorizado.