Incansable y todoterreno a sus 21 años, Delevingne entretiene a sus millones de seguidores con fotos osadas en Twitter y en Instagram y ya fue bautizada por la prensa internacional como la sucesora de la inmortal Kate Moss.
Sus desfiles y colaboraciones con firmas de moda como Burberry o Chanel son cada vez más comunes, y ahora la londinense, que no oculta su relación sentimental con la actriz latina Michelle Rodríguez, alternará la pasarela con el cine y la televisión.
The Face of an Angel, un largometraje del director británico Michael Winterbottom sobre el polémico caso de la estadounidense Amanda Knox, será la segunda aparición de Delevingne en el cine, tras su breve papel de princesa Sorokina en la cinta Ana Karenina (2012).
La modelo, conocida por sus oscuras cejas pobladas, representará a Melanie, una estudiante británica relacionada con Amanda Knox, encarcelada cuatro años en Italia por presuntamente asesinar a la británica Meredith Kercher en 2007 al no participar en un juego sexual y finalmente absuelta del crimen en 2011.
La película se estrenará este año y en ella Delevingne compartirá escena con su compatriota Kate Beckinsale y con el español Daniel Brühl (Rush, 2013).
La modelo londinense se había presentado anteriormente sin éxito a la audición para el papel protagónico de 50 Shades of Grey (Cincuenta sombras de Grey), la cinta sobre el famoso libro erótico de Erika L. James que estará en los cines en febrero de 2015.
La versátil Delevingne demostrará también sus dotes interpretativas en la serie Timeless de la cadena británica Sky Arts, en el papel de una joven cuyo marido es militar en Afganistán y que se estrena el 9 de junio.
Y, mientras se pone a prueba como actriz, su popularidad sigue en aumento. Su romance con la actriz Michelle Rodríguez, de 35 años, la ubicó en la mira de la prensa. En los últimos días, las imágenes de la pareja en topless y a los besos en playas mexicanas dieron la vuelta al mundo.
En paralelo, su carrera como modelo crece a pasos agigantados. Su próximo proyecto es ser la imagen, junto a la supermodelo Kate Moss, de la nueva fragancia de Burberry.
Fue la propia Delevingne la que develó esa colaboración con una foto de ambas abrazadas, vestidas con la icónica gabardina beige de Burberry, en su perfil de la red social Instagram, hace dos semanas.
La joven, nombrada modelo del año en los British Fashion Awards de 2012, fue la estrella del desfile de Burberry de la Semana de la Moda de Londres de este año, en la que estuvo presente también con la firma Mulberry, para la que diseñó una línea de bolsos.
Desde que desfiló como un ángel de Victoria's Secret en 2012, Delevingne no había vuelto a posar en ropa interior hasta que en enero se presentó la colección de lencería de primavera-verano de La Perla.
La cosmética es otro de los sectores en los que es reclamada y, junto a la exuberante Jourdan Dunn, fue imagen de la última campaña de belleza de Yves Saint Laurent.
El tándem Delevingne-Dunn recuerda a la explosiva pareja que formaban Moss y Naomi Campbell en los años 90.
Cara Delevingne, la pequeña de tres hermanas, nació el 12 de agosto de 1992 en una familia acomodada –su madre es una de las mejores amigas de la duquesa de York, Sarah Ferguson, y su padre es un importante hombre de negocios-, en el lujoso barrio londinense de Chelsea.
Su nariz afilada, sus gruesas cejas y sus grandes ojos azules llamaron la atención de la agencia de modelos Storm cuando acababa de cumplir 17 años.
Desde entonces, trabajó para marcas como Moschino, Jason Wu, Chanel, Zara, Oscar de la Renta, Burberry, Dolce & Gabbana, Stella McCartney, Mulberry y Victoria's Secret.