"Yo soy capaz de denunciar a mi hijo"

Elisa Carrió aseguró en InfobaeTV que está dispuesta a acordar con el PRO y otros sectores para el 2015. No obstante aclaró que eso no implica que no los controle. Habló de narcotráfico, el Fantoche de Cristina y el Papa

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"Yo soy capaz de denunciar a un hijo mío. No me pasó nunca, pero lo haría. Lo llevaría y lo acompañaría todo el tiempo, queriéndolo mucho", declaró Carrió en un reportaje con el periodista Juan Miceli. La confesión de "Lilita" está vinculada con la posibilidad de una alianza de su partido con espacios con los cuales históricamente estuvo enfrentada, como lo es el PRO de Mauricio Macri.

La diputada nacional aseguró que es capaz de denunciar a sus socios políticos y a gente de su entorno. Recordó como ejemplo una causa que encabezó contra el ex presidente Raúl Alfonsín, dirigente con el cual compartió sus inicios en la Unión Cívica Radical y a quien le tenía una gran estima. Carrió es tildada de "denunciadora serial" por parte de sus opositores.

La candidata presidencial en 2007 y 2011 explicó que el primer paso en el armado hacia 2015 será resolver la interna de Unen, que reúne a distintos partidos como el GEN, el radicalismo y la Coalición Cívica. El acuerdo se presentará el 22 de abril. El año que viene dependerá de las asambleas de los distintos partidos la posibilidad de una alianza con otros partidos como el PRO, que, de acuerdo a la visión de "Lilita", cuenta con dirigentes muy valiosos, entre ellos su amigo el ministro de Cultura Hernán Lombardi.

Narcotráfico

Carrió menciona a las mafias narco como uno de los principales problemas de la Argentina actual y está convencida de que existe connivencia con la dirigencia política. "Estamos tomados, basta ver los edificios vacíos que hay en Puerto Madero. Están en Tigre, lo dijo el secretario Sergio Berni. Está en todas las investigaciones. En la operación Luis XV de Lomas de Zamora son impresionantes las vinculaciones con el poder", analizó.

La legisladora está convencida de que el flagelo llegó al país con el arribo de María Victoria Henao, esposa de Pablo Escobar, hoy de moda en la Argentina por el éxito de la serie El Patrón del Mal. La ex mujer del líder narco y sus hijos se cambiaron el apellido y viven en el país desde mediados de los 90.

Carrió señala en la actualidad al senador Aníbal Fernández. Dice que "coordinó todo" cuando era ministro del gobierno nacional. Lo vincula con las muertes de General Rodríguez y de Campana en presuntos ajustes de cuentas de distintos carteles que operan en la Argentina.

"No querer darse cuenta es una opción. Tenemos denunciado a Aníbal Fernández por ser parte del narcotráfico. Pero ya va a llegar. Uno cuando sale afuera del país el nombre está claro. No es que los Estados Unidos y la inteligencia de los Estados Unidos no lo saben", detalló.

El alfajor de la presidente Cristina Kirchner

El jueves en Casa Rosada, la presidente Cristina Kirchner participó de un acto junto a autoridades de la empresa de alfajores Fantoche. Bromeó que le habían regalado un chocolate chico y no la clásica golosina triple porque quizás la veían gorda. Sus palabras tuvieron una gran repercusión, especialmente en las redes sociales.

"No pude ver el acto, pero me contaron. Cuando se mueren a diario tantas personas y la señora habla de alfajores, habla muy mal de la señora. Lo mismo que se alíe con Putin cuando la mayoría del mundo está tratando de evitar la tercera guerra mundial. Está metida en el pingüino, ése que le regalaron cuando volvió después de la operación", declaró.

Y completó: "Habla de un chocolate en medio de una crisis tan impresionante y eso es preocupante. Puede tener una regresión. Cuando está con el Papa tiene algo de niña, de que no se puede hacer cargo de las consecuencias de esta crisis".

El Papa

Carrió aseguró que Jorge Bergoglio era su pastor y que no va a usar esa foto para sacar réditos políticos. Sembró dudas sobre si en alguna ocasión viajó al Vaticano para visitarlo, ya que en caso de que se hubiese concretado el contacto, nunca lo habría hecho público, confesó.

"Si yo fuera a encontrarme con él, no me verían. Nadie se enteraría. Y de mi larga relación con él me alegro mucho porque esperé que me ayude como cristiana. No como política. Hay que separar la Iglesia de la política. Yo quiero que les dé la eucaristía a todos los divorciados y ese día voy a ir a la Plaza San Pedro a cantar y bailar", prometió.

La diputada nacional dijo que muchos de los que históricamente la estigmatizaron para sacarla del juego político por su fuerte arraigo católico, no saben cómo van a explicar las fotos que se sacan con Bergoglio. "¡Bergoglio está loco, entonces! Porque es místico, porque es Papa", cerró.