"Se trata de una medida de equidad de gran envergadura histórica, que permitirá a los italianos recibir en sus bolsillos cerca de 1.000 euros (unos 1.388 dólares) al año", aseguró Renzi. Afirmó que el Estado italiano dispone de los "medios financieros" para un recorte de impuestos que tiene como objetivo beneficiar a aquellos que ganan de 15.000 a 25.000 euros netos al año.
El joven primer ministro italiano, de 39 años, remarcó que con esas medidas se respetan las normas exigidas por la Unión Europea para mantener el déficit del Estado por debajo del 3% con respecto al PIB.
Anunció también un recorte del 10% al tributo que pagan las empresas a las regiones, el cual será financiado con un aumento del 20% al 26% de los impuestos a las ganancias financieras, a excepción de aquellas provenientes de obligaciones del Estado.