Los dos pasajeros que embarcaron con pasaporte robado en el avión de Malaysia Airlines desaparecido el pasado sábado con 239 personas a bordo eran iraníes, según pudo confirmar la Policía de Malasia. El jefe de ese cuerpo de seguridad, Khalid Abu Bakar, dijo que al menos uno de ellos "no es probable" que formara parte de una "célula terrorista".
"Creemos que estaba tratando de emigrar a Europa, más precisamente a Alemania, adonde se dirigía", apuntó el responsable policial malasio, sin aportar más datos sobre el segundo iraní.
Las autoridades explicaron que han
investigado al joven identificado presuntamente con el nombre de Eouria
Nour Mohammad Mehrdiad y que han contactado a su madre, quien esperaba
a su hijo en el aeropuerto de Frankfurt y "desconocía" que éste viajaba
con un pasaporte robado.
"Tenemos fotografías y perfiles de
todos los pasajeros. Estamos investigado en los videos los
comportamientos de todos ellos", aseguró Bakar.
Los
billetes de los dos viajeros con pasaportes falsos fueron comprados a
la vez, como indica su número de serie, y fueron encargados desde Irán a
dos agencias de viajes de Tailandia, informaron este martes fuentes oficiales
tailandesas. La compra de los dos tickets se realizó el
pasado día 6 -menos de 48 horas antes del vuelo- en establecimientos de la
localidad turística de Pattaya, a unos 100 kilómetros al este de
Bangkok, según la Oficina Nacional de Noticias de Tailandia.
"Aún tenemos que determinar quién reservó y compró los billetes para
esas dos personas. Pudieron ser ellos mismos o amigos suyos en
Tailandia", dijo Ratchtapong Tiasut, superintendente de la Oficina de Inmigración de la provincia de Chon Buri.
Un trabajador de una
de las agencias dijo al diario Bangkok Post que su compañía recibió el encargo de la reserva en un correo electrónico enviado desde Irán por un ciudadano iraní llamado Ali. El empleado aseguró conocer
personalmente al comprador, que tendría varios negocios en Pattaya y
que, según dijo, había reservado con anterioridad varios vuelos para él mismo y amigos cuando se encontraba en la ciudad.
Según el trabajador, Ali preguntó, en primer lugar, por vuelos a
Copenhague y Frankfurt con Etihad Airways o Qatar Airways, pero se
decantó por la opción más barata de China Southern Airlines, por la que
pagó 25.500 bat (unos 568 euros). Los billetes fueron reservados a China Southern Airlines -que compartía código con la aerolínea malasia- con salida en Kuala Lumpur y destino a Ámsterdam vía Pekín.
Los dos pasajeros embarcaron con identidades falsas, las del italiano Luigi Maraldi y el austríaco Christian Kozel, a quienes les habían
robado los pasaportes en Tailandia en 2013 y 2012 respectivamente.
En línea con las informaciones que maneja la Policía de Malasia, representantes de Interpol dijeron que no creen que la desaparición del avión se haya debido a un ataque. "Cuanta más información tenemos, más nos inclinamos a concluir que no es un incidente terrorista", dijo el secretario general del organismo, Ronald Noble.
Noble agregó que dos titulares de pasaportes iraníes habían intercambiado sus identificaciones para viajes en Kuala Lumpur y que habían utilizado documentación italiana y austríaca robada para abordar el avión malasio ahora desaparecido.
El vuelo MH370 despegó de Kuala Lumpur a las 00:41, hora local (16.41
GMT del viernes), y tenía previsto llegar a Pekín unas seis horas más
tarde, pero desapareció del radar una hora después. Los equipos internacionales de búsqueda y rescate aún no han encontrado evidencias de que el avión se estrellara en el mar.
En el avión viajaban 239 ocupantes, 227 pasajeros, incluidos dos menores, y una tripulación de 12 malasios.