A la hora de retomar el camino de recuperar la salud, no podemos caer en la simplicidad de una dieta o procesos mágicos de 15 días que resuelvan lo que le hicimos al organismo durante años. Además de una dieta rica en agua, frutas y verduras, con un consumo reducido de grasas y la eliminación de comidas rápidas, del cigarrillo, alcohol y café, el cuidado y el buen funcionamiento del intestino es fundamental en la recuperación de la salud, ya que juega un papel crucial en la eliminación de toxinas, sobre todo las que han sido procesadas por el hígado.
Cuando los intestinos trabajan con lentitud, las toxinas no son
eliminadas y son absorbidas de nuevo y llevadas al hígado para su reciclaje y
eliminación. La reabsorción de la bilis se asocia con el aumento en los niveles
de colesterol. También, cuando los intestinos son lentos y hay un aumento en
los niveles de toxinas, los microorganismos patógenos crecen para superar en
número a la flora normal causando disbiosis. Aunque la flora sea
necesaria para corregir esto, la obstrucción intestinal constituye el principal
problema. Cuando los intestinos se mueven otra vez, todo lo demás volverá a
estar en orden.
El
modo más fácil de conseguir que los intestinos se muevan y así eliminar
toxinas, es recurrir a una dieta alta en fibra a base de frutas frescas y
verduras. A veces, uno puede añadir fibra suplementaria como semillas de lino,
pero que deberán ser tomadas con cautela al principio. El cambio en la dieta no sólo estimula el
tránsito intestinal sino que facilita al intestino los aportes que necesita
para volver a funcionar por sí mismo correctamente, y así permitir la correcta
eliminación de toxinas y evitar la absorción en exceso de las mismas.
Antes de recurrir a una dieta desintoxicante es necesario tener en cuenta estos consejos:
-Los
adolescentes necesitan muchos nutrientes; es decir, muchas calorías y
proteínas para sostener el crecimiento y el desarrollo rápidos. Por lo tanto,
las dietas que incluyen ayunos o restricciones rigurosas de alimentos no son
una buena idea.
-Las
dietas de desintoxicación no están indicadas para personas con
enfermedades. No se recomiendan para personas con diabetes, enfermedad
cardíaca u otras enfermedades médicas crónicas. Si estás embarazada o tienes
problemas de alimentación, debes evitar estas dietas.
-Las
dietas de desintoxicación pueden ser un problema. Puede convertirse en una
adicción peligrosa que puede provocar problemas de salud, incluidos problemas
de alimentación graves, problemas cardíacos e incluso la muerte.
-Este tipo de dietas no ayudan a perder grasa. Es
posible que las personas que ayunan durante varios días pierdan algunos kilos,
pero la mayoría será agua y parte podría ser masa muscular. El peso perdido suele recuperarse de inmediato después de completar el programa.
-Las
dietas de desintoxicación están diseñadas sólo para alcanzar objetivos a corto
plazo. Además de causar otros problemas de salud, el ayuno durante
períodos prolongados puede hacer más lento el metabolismo de una persona, lo
que hace más fácil la recuperación del peso perdido y más difícil perderlo en el futuro.
Por
supuesto, es una buena idea ingerir una gran cantidad de frutas, vegetales y
fibras, y beber agua. Pero también hay que asegurarse de obtener todos los
nutrientes que se necesitan de otros alimentos, incluidas las proteínas (carnes magras, pescado, huevos) y el calcio (yogur o leche sin grasa o con bajo contenido).
Antes
de iniciar una dieta o proceso de desintoxicación a través de la web o una
revista siempre consulte con el médico para saber que tratamiento es el más
recomendable para su salud.
*Por la Dra
Graciela Aguirre MN 100972, especialista en cirugía plástica y reparadora.