Al menos 25 personas murieron en violentos enfrentamientos entre manifestantes antigubernamentales y las fuerzas del orden en el centro de Kiev en las últimas 24 horas. Otros 241 heridos están hospitalizados, entre ellos, 79 policías y cinco periodistas, según el último balance del ministerio de Sanidad.
El presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, decretó el jueves como día nacional de duelo en honor de los muertos. Las banderas ondearán a media asta en los edificios oficiales y se anularán los conciertos y competiciones deportivas, según un decreto publicado el miércoles en la página de la presidencia.
Los servicios especiales ucranianos anunciaron este miércoles la apertura de una investigación por lo que consideran un intento de toma ilegal del poder. La investigación se centra sobre "algunos políticos" que no nombra, según un comunicado de los servicios secretos (SBU).
En la misma línea, Rusia, un aliado incondicional de Yanukovich, denunció un "intento de golpe de Estado" y "exigió" a los líderes de la oposición que hagan cesar la violencia. Las presiones del Kremlin para que Ucrania rechazara un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE), para, así, permanecer bajo su área de influencia, fueron el detonante de las protestas.
"En el fondo, se trata de un intento de golpe de Estado", declaró el ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado. "La parte rusa exige que los líderes (de la oposición) hagan cesar el derramamiento de sangre en su país y reanuden sin dilaciones el diálogo con el poder legítimo sin amenazas ni ultimátum", agregó.
Pero la UE se está moviendo en sentido contrario. En las últimas horas anunció que estudiará sanciones contra los responsables de la represión, según comunicó la jefa de la diplomacia europea, a href="http://www.infobae.com/personajes/catherine-ashton-a340" rel="noopener noreferrer" Catherine Ashton/a.
La funcionaria convocó a los ministros de Relaciones Exteriores del bloque regional para una reunión extraordinaria dedicada a la crisis ucraniana. Se celebrará el jueves.
Mientras, este miércoles se reunirá con los embajadores de la UE encargados de las cuestiones de seguridad, con quienes "se estudiarán todas las opciones, incluyendo sanciones contra los responsables de la represión y de violaciones de los derechos Humanos".
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Laurent Fabius, declaró que habrá "deliberaciones con nuestros amigos alemanes y probablemente sanciones". "No permaneceremos indiferentes", agregó. Actualmente, la canciller alemana Angela Merkel se encuentra en París para un consejo de ministros conjunto.
El ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, afirmó que "Ucrania ha pagado muy caras las tácticas dilatorias del presidente Yanukovich". "Su negativa a llevar a cabo conversaciones serias sobre una solución pacífica del conflicto y una reforma constitucional es un grave error", agregó.
Mucho más duro fue el ministro de Relaciones Exteriores de Suecia, Carl Bildt, que estimó que Yanukovich es responsable de los muertos de Kiev y lo acusó de tener "sangre en las manos", en declaraciones por Twitter.
"Espero una fuerte unidad en el parlamento [sueco] hoy contra la violencia y la represión en Ucrania. Hay gente que muere en las calles de una capital europea. La UE no dudará en [tomar] medidas contra los intereses de las personas asociadas a la represión y la violencia", escribió.
Pedido del papa Francisco
Luego de su audiencia general en la Plaza San Pedro, el Sumo Pontífice envió un mensaje al pueblo y las autoridades ucranianas. Francisco afirmó que está "preocupado" por los disturbios y pidió a todas las partes que "cesen toda acción violenta".
"Sigo con el corazón preocupado lo que sucede en estos días en Kiev.
, por sus allegados y por los heridos", dijo.
"Invito a todas las partes a cesar toda acción violenta y a buscar la concordia y la paz del país", concluyó.