Más de 60 nuevas obras de arte, incluyendo pinturas de Monet, Renoir y Picasso, fueron descubiertas en la casa del nazi Cornelius Gurlitt en Austria, anunció el martes el vocero del octogenario alemán propietario del "tesoro" aparecido en noviembre pasado.
La noticia amplía la dimensión de un caso que sacudió al mundo del arte, cuando se supo que las autoridades alemanas habían encontrado y confiscado cerca de 1.400 obras en la casa de Gurlitt, hijo de un conocido coleccionista cercano a los nazis.
El tesoro artístico de Gurlitt incluía cuadros de grandes maestros como Chagall o Matisse, entre los cuales había pinturas que probablemente fueron expoliadas a judíos durante la era nazi.
Esta vez, las obras fueron halladas en una casa que el anciano tenía en Salzburgo, en el norte de Austria.
"Se trata de más de 60 piezas, entre las cuales hay obras de Monet, Renoir o Picasso"
"Se trata de más de 60 piezas, entre las cuales hay obras de Monet, Renoir o Picasso", indicó su vocero, Stephan Holzinger.
Holzinger afirmó, sin embargo, que después de una primera inspección no había indicios de que ninguna de las obras de arte recién descubiertas fuesen parte del botín nazi, un término que designa al arte que el régimen hitleriano robó a sus propietarios judíos o que les compró muy barato bajo amenazas.
Interrogada por la AFP, la Fiscalía de Augsburgo, a cargo del caso Gurlitt, se limitó a indicar que los investigadores se enteraron, con interés, de esta nueva información.
Cornelius Gurlitt, de 81 años, sospechoso de evasión de impuestos y receptación en a href="http://www.infobae.com/lugares/alemania-a335" rel="noopener noreferrer" Alemania/a, fue puesto en libertad después del primer hallazgo y actualmente es objeto de una investigación judicial.
Gurlitt es el hijo de Hildebrand Gurlitt, un marchante de arte que formó una buena colección durante los años 30 y 40. Aunque en un principio fue amenazado por los nazis por ser nieto de una judía, después sirvió al Tercer Reich, que le encargó vender obras confiscadas, expoliadas u obtenidas bajo extorsión.
Las primeras obras fueron descubiertas durante una investigación en el apartamento de Gurlitt, después de que las autoridades aduaneras lo encontraran en un tren a Suiza con 9.000 euros en efectivo.
Las autoridades alemanas fueron criticadas por su lentitud en este caso, ya que si bien las obras encontradas en su apartamento fueron descubiertas a principios de 2012, este espectacular hallazgo recién fue difundido públicamente a fines del año pasado gracias a un artículo en una revista.