La organización del Mundial de 2014 en Brasil tiene un presupuesto máximo de 33.000 millones de reales (unos 13.750 millones de dólares) e inyectará en la economía un valor tres veces superior, de 112.000 millones de reales (unos 46.666,7 millones de dólares), informaron este miércoles fuentes oficiales.
Los datos fueron suministrados por el ministro de Deportes de Brasil, Aldo Rebelo, en un artículo que ofreció para diferentes diarios, en desarrollo de la campaña lanzada la semana pasada por el Gobierno para divulgar informaciones sobre los beneficios generados por el Mundial e intentar impedir manifestaciones contra el evento.
El ministro alegó que el Mundial de fútbol generará riquezas que "ayudarán a resolver los problemas estructurales y seculares del país", y que, por ese motivo, las inversiones en el evento no pueden ser consideradas como "gastos a fondo perdido", sino como "inversiones y patrimonio social incomparable al aplicado en el torneo".
"El Mundial tiene un presupuesto techo de 33.000 millones de reales contabilizados desde que Brasil fue escogida como la sede en 2007. Consultorías independientes calculan que entre 2010 y 2014 circularán en la economía brasileña 112.000 millones de reales adicionales (gracias a la organización del evento)", afirmó.
Rebelo agregó que en ese período serán generados 3,6 millones de empleos y una renta extra para la población de 63.480 millones de reales (unos 26.450 millones de dólares). Para el ministro, el Mundial no sólo se financia solo, sino que genera riquezas para el país.
"El Mundial dura un mes, pero quedan como utilidad pública para el país aeropuertos, puertos, viaductos, vías de tránsito rápido, mejorías en seguridad y telecomunicaciones", subrayó.
El funcionario dijo entender que personas de buena fe por convicciones particulares o motivaciones ideológicas se opongan al Mundial, por creer que los recursos serían mejor aplicados en salud o educación.
Agregó que, por el contrario, no ve "buena fe ni lisura intelectual" en los grupos políticos partidarios que se proponen boicotear el Mundial, porque, supuestamente, destina recursos públicos a cosas superfluas y le resta inversiones a la educación y la salud.
"Los recursos para los sectores sociales no paran de crecer. Entre 2007 y 2013, fueron invertidos 311.600 millones de reales (unos 129.833,3 millones de dólares) en educación y 447.000 millones de reales (unos 186.250 millones de dólares) en salud", comentó.
Rebelo aseguró que esos datos muestran que "la estridencia y la violencia llevada a las calles contra el Mundial desvían el debate".
Según el funcionario, los estadios para el Mundial fueron construidos en parte con créditos concedidos por el banco brasileño de fomento (BNDES), que recibirá los recursos de vuelta en el futuro.
Los grupos que protestan contra el Mundial y que exigen hospitales y escuelas públicas de la misma calidad que los estadios exigidos por la FIFA consiguieron convocar a numerosos manifestantes durante sus actos en la Copa Confederaciones el año pasado, y tienen programadas nuevas movilizaciones para este año y durante el evento.