a href="http://www.infobae.com/2014/01/31/1540674-el-gobierno-bachelet-tiene-su-primera-crisis-antes-haber-asumido" rel="noopener noreferrer" Claudia Peirano/a, subsecretaria de Educación designada una semana atrás por la presidente electa Michelle Bachelet, anunció el martes su renuncia. En su lugar fue nombrada la ingeniera civil y magíster en Economía Valentina Quiroga.
"Mi designación ha sido polémica. Se han dicho cosas injustas e incorrectas sobre mi persona"
"Sé que mi designación ha sido polémica. Se han dicho cosas injustas e incorrectas sobre mi persona. Por ello he tomado contacto con la presidentr electa para expresarle mi agradecimiento y le he señalado que, dadas las condiciones, decidí dar un paso al costado y no asumir el puesto", declaró la viceministra en una comparecencia pública junto al ministro designado de Educación, Nicolás Eyzaguirre.
El nombramiento de Peirano como subsecretaria de la cartera de Educación había sido la causa, días atrás, de la primera crisis dentro de la coalición de gobierno, al generar fuertes críticas del ala izquierda, particularmente de miembros del Partido Comunista.
Fueron los dirigentes del movimiento estudiantil que en las últimas elecciones ingresaron al Congreso en las listas de la Nueva Mayoría, como Camila Vallejo, Giorgio Jackson y Gabriel Boric, quienes apuntaron más fuerte contra la funcionaria por su perfil conservador y su cercanía a Democracia Cristiana.
Los cuestionamientos surgieron por las declaraciones de Peirano durante la campaña electoral, cuando se pronunció contra la gratuidad educativa, reclamo histórico del movimiento estudiantil chileno.
"La trayectoria y opiniones públicas de Claudia Peirano parecen apuntar a una dirección distinta al mandato que el pueblo le dio al gobierno de la Nueva Mayoría", había manifestado Vallejo en declaraciones ante los medios.
También se le reprochó que hasta 2012 estuvo casada con un dirigente del partido político Democracia Cristiana (DC) y dueño de una cadena de colegios privados subvencionados, algunos de los cuales fueron asesorados por una empresa consultora de Peirano.
A pesar del malestar generado en la coalición de gobierno, el domingo Bachelet había defendido en conferencia de prensa la designación de Peirano alegando que se trataba de "una profesional de excelencia, reconocida nacional e internacionalmente".
No obstante, la defensa de la futura mandataria no fue suficiente y se vio obligada a nombrar a Valentina Quiroga sólo dos horas después de la renuncia de Peirano.
La nueva subsecretaria era una de las candidatas originales para el cargo, ya que durante el último tiempo se había desempeñado como encargada del área de Educación del programa de gobierno de Bachelet y fue fundadora y directora del área de Política Educativa de Educación 2020, una fundación sin fines de lucro que busca calidad y equidad en la enseñanza.
De acuerdo con el diario chileno El Mercurio, Quiroga es cercana a Revolución Democrática, el espacio político conformado por dirigentes del movimiento estudiantil y encabezado por el diputado electo Giorgio Jackson.
Melissa Sepúlveda, la actual presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), valoró en declaraciones al iCanal 24 Horas/i la renuncia de Peirano, pero consideró que su decisión se debió más a las "presiones" que a un "viraje político" en la coalición de Bachelet, Nueva Mayoría.
Además calificó como "una mala señal para el movimiento estudiantil" los nombramientos de Eyzaguirre y Peirano al frente de la cartera de Educación por su "carácter economicista y ligado el mundo empresarial".
Gabriel Boric, ex dirigente estudiantil, elogió a través de Twitter la renuncia de Peirano y señaló que "hay que reconocer los gestos de grandeza cuando se realizan".
La importancia de la cartera de Eduación del próximo gobierno se debe a que una de las principales promesas de campaña de Bachelet ha sido responder al reclamo estudiantil y aplicar una reforma sobre el sector que establezca la gratuidad educativa.
Sin embargo, entre los estudiantes priman las dudas, ya que durante el mandato anterior de la ex responsable de ONU Mujer (2006-2010), el sistema arancelado, heradado del gobierno de Augusto Pinochet, no fue siquiera cuestionado.