El segundo Superclásico del año fue para River

En el Mario Alberto Kempes, con goles de Manuel Lanzini y Juan Carlos Menseguez, el conjunto de Ramón Díaz derrotó 2 a 0 a Boca. Carlos Bianchi fue expulsado en el entretiempo. Dentro de siete días volverán a verse las caras

Télam 162

El segundo espectáculo de la trilogía de Superclásicos veraniegos se disputó en Córdoba, donde el Mario Alberto Kempes recibió a una multitud desesperada por la victoria. El hecho de que ninguno de los equipos haya conseguido sumar de a tres en sus presentaciones anteriores generaba una obligación para los protagonistas. Claramente, la noche no daba lugar al empate, lo que significaba que la promesa de vencedores y vencidos estaba planteada de antemano.

Con un marco imponente, en el que se batió un récord Guiness por el flameo constante de las banderas de ambas parcialidades, River salió al campo de juego con un mensaje hacia una de las ausencias más notorias que tendrá el próximo Mundial: Radamel Falcao.

Con los dientes apretados, los de Ramón Díaz demostraron su agresividad desde el pitazo inicial de Diego Abal. Con solamente seis minutos transcurridos, el "Millonario" logró abrir el marcador, gracias a la aparición de Manuel Lanzini. Con total libertad, el enganche ingresó por el centro del área y anotó el 1 a 0. Sin dudas, no se podía esperar un mejor arranque para los del riojano.

En este contexto, la actuación de Teófilo Gutiérrez fue fundamental para lastimar a la frágil defensa "xeneize". Además de asistir a "Manu", el colombiano se las ingenió para quedar mano a mano frente a Emanuel Tripodi, quien logró desviar la definición del atacante y evitar el segundo grito de la entidad de Núñez. Cabe destacar que la ayuda del poste favoreció notoriamente al arquero, dado que el balón rebotó contra el vertical y salió despedido hacia los guantes del ex Quilmes. La pasividad boquense favorecía al combinado del "Pelado", ya que los únicos intentos para alcanzar el empate se desvanecían en remates de larga distancia de Luciano Acosta.

Además, antes de irse al descanso, Juan Carlos Menseguez impuso el 2 a 0, en lo que fue un contragolpe perfecto. Gracias a una nueva intervención de "Teo", el "Rayo" llegó sin marcas para establecer el segundo festejo de la noche. La superioridad de River ya era indiscutible, por lo que le daba a Carlos Bianchi un arduo trabajo para cambiarle la imagen a un Boca que estuvo ausente durante los primeros 45 minutos.

En el complemento, los del "Virrey" salieron con otra actitud y a través de las pelotas paradas pudieron llegar al descuento. La más clara llegó a los 15, cuando Fernando Gago buscó a Juan Forlín con un centro preciso y punzante, pero la técnica del defensor no fue suficiente para quebrar la resistencia de Marcelo Barovero. "Trapito" realizó una maniobra soberbia para desactivar el peligro y mantener la cómoda ventaja de dos goles.

Con más actitud que ideas creativas, el "Xeneize" buscó el tanto que nunca llegó, mientras que el circuito ofensivo de la "Banda" funcionaba cada vez mejor. Las constantes proyecciones de Leonel Vangioni, junto con la sutileza de Lanzini y la potencia del colombiano, los de Ramón Díaz generaron ocasiones que le hubiesen permitido decorar un triunfo histórico. Sólo por las sacrificadas tapadas de Tripodi, el Mario Alberto Kempes no testificó una humillante goleada.

Dentro de siete días se volverán a ver las caras en Mendoza y Boca tendrá la necesidad de quedarse con la victoria, porque en Córdoba la gloria se vistió de rojo y blanco. El imperio "Azul y Oro" buscará contratacar a un River que llegará más cansado, debido a la escala que realizará en Salta para enfrentar a San Lorenzo.

Por Fernando Taveira - ftaveira@infobae