El servicio de mensajería Snapchat es cada vez más elegido por adolescentes y jóvenes para enviar fotos o videos a sus contactos que se eliminan automáticamente tras ser vistos. En septiembre, la aplicación reveló que gestionaba alrededor de 350 millones de mensajes evanescentes por día.
Sin embargo, un grupo de hackers vulneró las bases de datos de Snapchat y expuso en una página web los nombres de usuario y números de teléfono de 4.6 millones de usuarios de la app, difuminando los últimos dos dígitos de los teléfonos. El sitio web estuvo online durante algunas horas y luego fue retirado.
En principio, los usuarios afectados estarían únicamente en los Estados Unidos y en algunos sectores de Canadá, según los códigos de área telefónicos que se vieron en la filtración.
Sin embargo, algunos desarrolladores que pudieron acceder a la página crearon una herramienta para que los usuarios pudieran revisar si sus datos habían sido expuestos en el hackeo. Al ingresar el número de teléfono o el nombre de usuario, la página advierte si la información personal se encontró entre los datos comprometidos.
El hackeo sucedió tan solo una semana después de que Snapchat se refiriera al agujero de seguridad que la firma de seguridad Gibson Security dijo haber descubierto en agosto de este año y sobre la que le advirtió a la app a comienzos de la semana pasada.
El viernes pasado, la aplicación minimizó la potencial filtración de los números telefónicos de sus usuarios como producto de un hackeo a la funcionalidad que incorpora la app para encontrar contactos. En una publicación en su blog, Snapchat dijo que había tomado medidas de seguridad para poner un freno a ese riesgo.
Los hackers, por su parte, dijeron al sitio The Verge, que filtraron los datos de los usuarios para que estos se percaten de la gravedad del problema y, adicionalmente, para presionar a Snapchat a tomar medidas y solucionar el agujero de seguridad de forma definitiva.