El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, volvió a amenazar este jueves con pasar a manos de Nación el servicio de distribución de electricidad al afirmar que es "una de las hipótesis de trabajo" que analiza el Gobierno en el caso de que las empresas no cumplan con el contrato de concesión. Al respecto, adelantó que otra posibilidad es que la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires se hagan cargo del servicio.
"Es una de las hipótesis de trabajo", dijo Capitanich al ser consultado por la prensa respecto a si el Gobierno continúa analizando la posibilidad de estatizar el servicio, tras lo cual agregó que "también existen otras hipótesis de trabajo como la posibilidad de la transferencia directa a la provincia de Buenos Aires y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires".
El jefe de Gabinete planteó estas hipótesis de trabajo al participar de la firma de un acuerdo hidrocarburífero entre la provincia de Chubut y la petrolera nacional YPF, oportunidad en la que volvió a responsabilizar a las empresas Edenor y Edesur de los inconvenientes registrados en la prestación del servicio eléctrico.
"La responsabilidad primaria le cabe y les compete a Edesur y Edenor", reiteró Capitanich al plantear que el Estado a través de sus entes reguladores tiene "la disponibilidad para la implementación de las multas correspondientes y las estrategias de resarcimiento por el incumplimiento del contrato de concesión".
En esa misma línea, aseveró que "son las empresas las que deben responder rápidamente a las demandas de sus clientes, las que deben explicar por qué existen los cortes y por qué no han efectuado las inversiones en tiempo programado en virtud del contrato de concesión".
Al ser consultado sobre los argumentos de las empresas respecto a la necesidad de ajustar las tarifas para cumplir con mayores inversiones, Capitanich afirmó: "No pueden utilizar la excusa de las tarifas para tener de rehenes a sus clientes y usuarios".
"Si no están en condiciones de prestar el servicio, tienen que notificar formalmente al Estado que no están dispuestos a ejecutar el contrato en esas condiciones, y de esa manera se establecen los mecanismos para la prestación de servicios", finalizó el jefe de ministros.
Horas antes, el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, destacó que "en las últimas semanas, en ningún momento hubo falta de volumen de energía, sino que son problemas en la distribución" de electricidad, con lo que volvió a apuntar las responsabilidades a las empresas Edenor y Edesur en el caso de los inconvenientes en el Área Metropolitana Buenos Aires.
El ministro hizo referencia a que "hace 40 años que no se producía una ola de calor de esta magnitud", y se comprometió a "resarcir económicamente los daños provocados por los cortes de energía, una vez que concluya esta contingencia".
El agobiante calor de la última semana no sólo generó inconvenientes en la Ciudad de Buenos Aires y el cordón bonaerense, sino que también impactó fuertemente en ciudades del interior del país, donde las tarifas, en algunos casos, triplican a las que se abonan en el área metropolitana.
De hecho, el propio De Vido admitió que se mantiene en contacto con las empresas provinciales de electricidad de Córdoba y Santa Fe y con Edelap de La Plata.