Barinas, la tierra de Hugo Chávez que ahora gobierna la oposición

Las elecciones que se celebraron el domingo pasado en Venezuela tuvieron una gran sorpresa. El candidato oficialista fue derrotado por el abanderado de la Mesa de la Unidad, José Luis Machín, en la capital del estado donde nació el fallecido líder bolivariano

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Con menos de 250.000 habitantes y con una economía principalmente rural, el municipio de Barinas no sería uno de los premios mayores que ganar en las elecciones, de no ser porque se trata de la capital del estado donde nació Hugo Chávez. Y eso la convierte en uno de los bastiones más dolorosos que perdió el Partido Socialista Unido de Venezuela en los comicios del domingo pasado.

El 8 de diciembre, Día de la Lealtad a Chávez, los ciudadanos de Barinas eligieron como alcalde a José Luis Machín Machín, un candidato independiente que se unió a la coalición opositora de la Mesa de la Unidad Democrática, liderada por Henrique Capriles. Machín, de 52 años, obtuvo en el municipio, ubicado en el estado de igual nombre en el oeste del país, el 50,44% de los votos, mientras que el oficialista Edgardo Ramírez recibió un 48,58 por ciento.

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La oposición también ganó en José Antonio de Sucre, con el alcalde electo Ronald Aguilar (MUD). En Rojas, el vencedor fue Adelsi Rodríguez, independiente y de pasado chavista. El PSUV triunfó en los nueve municipios restantes del estado de Barinas, gobernado por Adán Chávez, hermano del fallecido líder de la revolución bolivariana.

Desde que Hugo Chávez llegó al Poder Ejecutivo, en 1998, nunca antes un opositor había podido arrebatarle la tan preciada Barinas. ¿Qué cambió ahora? El politólogo y coordinador para el estado Lara de la Federación Venezolana de Ciencia Política Yosbert Vázquez indica a Infobae que hubo varios factores por los que el chavismo perdió el municipio capital, que tiene "un gran valor simbólico".

Uno de estos factores es el malestar generado por la gestión de Adán Chávez, que gobierna desde 2008. Pero, más importante, Vázquez agrega que hay un descontento en general con los líderes del chavismo que "no están cumpliendo con el legado de Chávez". "Durante la gestión chavista, la oposición no había podido ganar ese municipio. Si pierden estos espacios es porque pierden credibilidad, por ese descontento con la presidencia de Nicolás Maduro, que no está cumpliendo con el legado", afirma.

"El voto castigo del chavismo fue la abstención"

"Un grupo del chavismo no se movilizó a votar, estuvo desmotivado. En estas elecciones municipales, hubo un voto castigo contra las malas gestiones, pero es difícil pensar que los chavistas hayan votado por la oposición. Es posible que ese voto castigo haya sido más bien a través de la abstención", subraya. En efecto, el nivel de participación en Barinas fue solamente del 52,85%, una de las más bajas de todo el estado.

Por su parte, el jefe de campaña de Machín, Gustavo Mora, hace hincapié en el atractivo que generó Machín para el electorado y remarca que el candidato supo ganarse el respeto de "los dirigentes de abajo, de la oposición, del Gobierno y de los diferentes partidos políticos". "Él tiene mucho tiempo en la política y mucha lucha social", sostiene su asesor a Infobae.

El alcalde electo, quien ya compitió para el cargo en los años 2000 y 2005 de manera independiente, centró su campaña en promover una cultura ciudadana, un municipio "luchador" y una ciudad "amigable y respetuosa".

En la victoria, añade Mora, también influyó la percepción negativa sobre el alcalde saliente, Abundio Sánchez, del PSUV. "La gestión anterior no fue buena. La ciudad vive en un estado de anarquía total, de irrespeto de normas y de falta de cultura ciudadana. Las calles están en mal estado, los precios no están controlados; hay demasiada violencia y crímenes", asegura.

Asimismo, remarca que Barinas está dividida en dos y que cada mitad mantiene una posición distinta. Por un lado, un ámbito metropolitano, donde hay gente más instruida, con más formación y acceso a internet, y que no necesita de la ayuda del Gobierno; por el otro, una parte muy pobre que sí depende del asistencialismo y "mantiene relaciones clientelares con el PSUV".

En ese sentido, con el eslogan de campaña "¡Viva Barinas!", Machín propuso en los primeros puntos de su programa de gobierno una mayor inclusión, promover el desarrollo e invertir en las actividades agro-productivas. También mantuvo un discurso conciliador y sin confrontación, algo que, para Mora, prendió en la ciudadanía.

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La derrota en Barinas, no obstante, fue minimizada por el Gobierno, a pesar de su carga simbólica y de que debido a sus características rurales responde al perfil del electorado típicamente chavista.

En los comicios municipales, el PSUV obtuvo, en suma, el 71,46% de los votos y 240 municipios en total. En tanto, la oposición ganó en ciudades de importante valor económico y de mayor población, como Maracaibo, Valencia y el Distrito Metropolitano de Caracas, a la vez que consiguió aumentar los municipios bajo su bandera política a 75.

De acuerdo con Vázquez, el Gobierno "intenta mostrar que ganó porque tiene la mayoría de las alcaldías, aunque perdió en cantidad". "¿Cómo alguien gana si pierde espacios de poder? Es una contradicción", considera. En ese marco, se inscribe Barinas, la tierra de Hugo Chávez que ahora gobierna la oposición.