Luego de otra noche complicada en algunas provincias del interior del país y tras la muerte de un joven en Concordia, Entre Ríos, en medio de saqueos generalizados, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich indicó que el Gobierno está "consternado" por "acciones deliberadas de grupos que pretenden generar caos y zozobra".
En una conferencia de prensa realizada en Casa de Gobierno, el funcionario vinculó las protestas policiales y los saqueos a los 30 años de democracia que se cumplirán mañana, fecha en la cual el Gobierno tiene previsto realizar un gran festival junto a los últimos ex presidentes.
"Es un hecho que no se advertía en 30 años de democracia. No es casualidad que esta caricatura de una dictadura genocida pretenda socavar la legitimidad democrática cumpliendo la Argentina 30 años de democracia ininterrumpida", indicó.
El jefe de ministros hizo hincapié en que el modus operandi de las revueltas en el interior del país es similar: comienza con una protesta salarial de policías y continúa con saqueos en comercios y supermercados. En ese marco, habló de sedición y pidió que la Justicia actúe de oficio "bajo esa hipótesis".
"En algunos aspectos pueden enmarcarse en delitos de sedición, en otros en el marco de la ley de defensa de la democracia. El Poder Judicial debe actuar muy eficazmente ante estos hechos vandálicos. Es necesario que actúe de oficio. Existen filmaciones, fotos, identificaciones de personas que cometen delitos de acción pública", resaltó.
Capitanich pidió una respuesta de todo el arco político y la sociedad argentina con el objetivo de garantizar el orden público y la paz. Y solicitó "autoridad política" a los gobernadores para encauzar la situación.
La semana pasada comenzaron conflictos en distintos puntos del país. El disparador fue la provincia de Córdoba, donde policías se acuartelaron en reclamo de mejoras salariales en medio de una ola de asaltos y saqueos. Una vez que se alcanzó un acuerdo en Córdoba, empezó un efecto dominó en Catamarca, Río Negro, Entre Ríos y Buenos Aires, entre otros distritos en los que aún continúa la tensión.
El gobierno nacional, a través de Capitanich, afirmó que mantuvo contacto constante con los gobernadores de las provincias donde se registran los principales focos de tensión. En muchos de ellos se ha decidido enviar a gendarmes y prefectos, tal como sucedió en la ciudad de Rosario, que este lunes amaneció repleta de fuerzas federales.